El documento discute la relación entre la sociología y la administración empresarial. Explica que las empresas no solo tienen una función económica, sino que también desempeñan un papel social importante al satisfacer las necesidades de la sociedad y estar compuestas por agentes sociales. Además, traza las conexiones entre la sociología, la administración y otras ciencias sociales, y describe cómo la sociología puede ayudar a comprender mejor el desarrollo y funcionamiento de las organizaciones.
1. 1.3 Aplicación de la sociología en la gestión empresarial.
La empresa no tiene una mera función económica, ya que se compone por
agentes sociales y desempeña una función pública.
Un agente social es un individuo que no sólo mantiene relaciones orientadas a la
producción, sino que mantiene otras relaciones con los demás agentes resultado
de su presencia física
Desempeña una función pública porque contribuye a satisfacer las necesidades
de la sociedad.
“Una empresa es una organización y una institución social compuesta por un
conjunto de individuos organizados de forma racional, con el fin de producir y
distribuir bienes y servicios dentro de una sociedad determinada en condiciones
de máximo beneficio”.
El Ingeniero llevara a cabo de manera reservada los roles que tiene cada
compañero de trabajo, para lograr una mayor interacción sobre su persona; pero
no usarlos con el fin de burlase por pertenecer a algún grupo, raza, etc. sino
usarlos de la mejor manera posible para una mejor convivencia.
La sociedad o institución en la que este laborando se identifica en la forma de
cómo este relacionándose; debe aportar sus conocimientos o experiencias que
tiene o haya adquirido hacia la demás gente, así mismo debe aprender a escuchar
y aceptar los comentarios que se le hagan como también respetara la información
que este diciendo un compañero.
Para lograr estabilizarse en un empleo o crear su propio negocio tendrá que
reconocerse psicológicamente por si mismo que puede hacer cualquier cosa, tener
confianza al hacer las cosas e iniciativa. Deberá mostrar liderazgo con los demás
si quiere seguir progresando ya que si no lo realiza lo pisotearían y ya no habría
respeto entre su patrón o sus compañeros de trabajo.
2. 1.3.1 La relación de sociología con la administración y
otras ciencias.
Existe una relación estrecha entre la Sociología y la Ciencia de la Administración,
tal como se puede percibir en Juan Carlos Bonnin y Lorenz von Stein, quienes
estuvieron activos en París durante períodos de tiempo muy próximos. En la
época en la cual Saint-Simón produjo su obra: El Sistema Industrial, Bonnin había
hecho una breve y fructífera incursión, única por cierto, en el naciente campo de la
Sociología. Escribió su libro Doctrina Social en 1820, se trataba de un catálogo
político-constitucional relativo a la ciudadanía integrado 91 aforismos, que
enuncian los derechos del hombre y el ciudadano. La obra constituye un
manifiesto de la existencia autónoma de la sociedad y propone el alumbramiento
de la Ciencia Social, como la denominó antes que lo hiciera Comte. Bonnin
visualizó a la Ciencia Social como una disciplina aplicada que instruye al hombre y
regula sus derechos, y que dividió en política y moral.
"De todo lo que el hombre debe a su inteligencia, la Ciencia Social es la primera
por su naturaleza, su importancia y su utilidad; ella tiene una aplicación más
personal a los hombres que las ciencias físicas, porque ordena la sociedad
misma".
Además de esta fugaz incursión en la Ciencia Social, Bonnin ya la había cultivado
dentro del estudio de su materia preferente, que redituó en su obra magna:
Principios de la Administración Pública, preparada 12 años antes que la Doctrina
Social. Los Principios aparecieron en 1808, pero su edición más completa fue la
de 1812, donde elaboró categorías sociológicas muy relevantes tales como:
relaciones administrativas públicas y relaciones administrativas civiles. Bonnin,
con base en esas categorías, afirmaba "la Ciencia de la Administración puede ser
considerada como el conocimiento de ciertas relaciones sociales".
3. La administración de la vida social constituye un magno universo en el cual incide
la actividad del Estado, pues trata de la policía social, la política social, la policía
de la medicina, la asistencia pública, la administración del trabajo y el sistema de
capitalización social. Esta categoría conserva la riqueza de sus concepciones
sociológicas. Dentro del prólogo del libro La Teoría de la Administración, una frase
resume dicha concepción: la constitución no debe considerarse como un mero
ordenamiento político abstracto, sino como resultado de la "organización
económica y social, que cuando se modela sobre la división de bienes materiales,
hunde su historia en las posiciones recíprocas de las clases dominantes y las
clases trabajadoras". Esta concepción sirve de fundamento a la definición que
brinda Von Stein de administración como la actividad del Estado de cara a la
sociedad, y que la visualiza como un elemento autónomo de vida.
4. 1.3.2 Relación de la sociología con las organizaciones.
Estudiar el desarrollo de las organizaciones desde el campo sociológico, implica
entender el problema social y que viene a ser todo lo que preocupa a la gente y/o
situaciones que afectan a un número considerable de personas de un modo
considerado perjudicial, y que la gente cree que pueden y deben corregirse, por
medio de la organización social, que es el alma y medio que desarrolla la vida de
la gente y los individuos miden su categoría social por el grado que les permite
contribuir el manejo de esas piezas de la maquinaria social y por el orden social
que son fundamentales también para el desarrollo de la sociología organizacional.
Blackmar, sugirió que el estudio de la sociología requiere una amplia base de
ciencias naturales, una perspectiva cultural y un discernimiento profundo dentro de
la naturaleza humana, obtenida a través de un conocimiento de psicología,
historia, ciencias, políticas y economía.
La Sociología para que realmente se desarrolle, requiere como requisito básico
conocer las condiciones históricas y culturales de cada país, evitando que los
dirigentes conductores de sus respectivas organizaciones fracasan en su gestión
de imitar las estrategias, tácticas y procedimiento empleados en otros países; lo
que se busca es encontrar la mayor eficiencia en el accionar de los dirigentes,
tendientes a pensar y crear con criterio ético, racional, objetivo, que permite
analizar y restituir la rectificación de los valores, con cambios que propendan hacia
la supremacía de una cultura humanista como aspiración máxima de lograr el
desarrollo de la sociedad en toda su integridad.