Este poema habla sobre un amor que se siente cercano a pesar de la distancia física. La autora describe cómo el amor de su pareja la inspira a escribir poesía y la hace sentir viva nuevamente a pesar de la separación, como las aguas de un río que fluyen lejos pero permanecen conectadas a su origen. Ella extraña los tiempos en que estaban juntos y navegaban en la misma canoa, mirándose el uno al otro desde las orillas.