1. SERIE: Descansar en el Señor
Después de la tormenta
Idea central
Aún en medio de la tempestad, Dios está con nosotros y tiene un propósito mayor para
nuestra vida.
Introducción
El paso de los huracanes nos muestra cuán poderosos y devastadores pueden llegar a ser.
Un panorama de destrucción y muerte lo vemos a menudo en los telediarios con el
surgimiento de una tormenta tropical. Pero, aunque parezca difícil de creer, algunos
ciclones tropicales pueden generar efectos muy positivos en la tierra y en los océanos:
llevan lluvias a zonas de sequía, aumentan el caudal de ríos y arroyos arrastrando consigo
residuos contaminantes, recargan acuíferos, ayudan al equilibrio de calor en los océanos y
conducen nutrientes al mar. Podemos ver, entonces, que siempre hay un propósito mayor
y necesario para cada tormenta.
• Punto 1 Sobre la roca
S. Mateo 7:24-27 RVR1960
Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre
prudente, que edificó su casa sobre la roca. Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron
vientos, y golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca.
Pero cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un hombre
insensato, que edificó su casa sobre la arena; y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron
vientos, y dieron con ímpetu contra aquella casa; y cayó, y fue grande su ruina
Jesús nos prepara para la tormenta y nos pide que edifiquemos nuestra vida sobre Su
Palabra. La probabilidad de debamos atravesar por tempestades es muy alta, pero Dios
nos librará de cada una de ellas con Sus principios. Es importante basar nuestras
decisiones en Su Palabra. Jesús no nos dice que al aplicar Sus enseñanzas seremos libres
de tormentas, pues las tormentas siempre serán inevitables; pero lo que sí podemos
evitar es que una tormenta destruya lo que nos ha costado construir cuando nos
aferramos a Su Palabra.
2. Nos advierte sobre el modo de construir, invitándonos a escuchar su palabra y ponerla en
práctica, obrando prudentemente y sobre roca. Edificar sobre arena es exponernos
imprudentemente a un derrumbamiento lastimoso.
• Punto 2 No temas
Hechos 27:18-20 Reina-Valera 1960 (Pablo es llevado a Roma como prisionero, tempestad
en el mar)
18 Pero siendo combatidos por una furiosa tempestad, al siguiente día empezaron a alijar
(aliviar la carga, echaron la carga), 19 y al tercer día con nuestras propias manos arrojamos
los aparejos (cuerdas para manejar el barco) de la nave. 20 Y no apareciendo ni sol ni
estrellas por muchos días, y acosados por una tempestad no pequeña, ya habíamos
perdido toda esperanza de salvarnos.
Hechos 27:22-25 Reina-Valera 1960
22 Pero ahora os exhorto a tener buen ánimo, pues no habrá ninguna pérdida de vida
entre vosotros, sino solamente de la nave. 23 Porque esta noche ha estado conmigo el
ángel del Dios de quien soy y a quien sirvo, 24 diciendo: Pablo, no temas; es necesario que
comparezcas ante César; y he aquí, Dios te ha concedido todos los que navegan contigo.
25 Por tanto, oh varones, tened buen ánimo; porque yo confío en Dios que será así como
se me ha dicho.
Hechos 27:42-44 Reina-Valera 1960
42 Entonces los soldados acordaron matar a los presos, para que ninguno se fugase
nadando. 43 Pero el centurión, queriendo salvar a Pablo, les impidió este intento, y
mandó que los que pudiesen nadar se echasen los primeros, y saliesen a tierra; 44 y los
demás, parte en tablas, parte en cosas de la nave. Y así aconteció que todos se salvaron
saliendo a tierra.
La historia que se relata en el capítulo 27 de los Hechos de los Apóstoles es una de las más
emocionantes y aterradoras experiencias que Pablo vivió. Durante todo este capítulo
vemos al apóstol advertir que no era prudente y seguro continuar navegando, pero no fue
escuchado y al continuar el viaje fueron azotados por una gran tormenta. Dios le habló a
3. Pablo diciéndole que no temiera porque Él tenía un plan mayor para su vida, por lo que
trató de trasladar esa confianza y seguridad a toda la tripulación. A pesar de que la nave
fue totalmente destruida, se salvaron todos.
•Punto 3 Propósito
Hechos 28:1-11 Reina-Valera 1960
Pablo en la isla de Malta
28 Estando ya a salvo, supimos que la isla se llamaba Malta. 2 Y los naturales nos trataron
con no poca humanidad; porque encendiendo un fuego, nos recibieron a todos, a causa
de la lluvia que caía, y del frío. 3 Entonces, habiendo recogido Pablo algunas ramas secas,
las echó al fuego; y una víbora, huyendo del calor, se le prendió en la mano. 4 Cuando los
naturales vieron la víbora colgando de su mano, se decían unos a otros: Ciertamente este
hombre es homicida, a quien, escapado del mar, la justicia no deja vivir. 5 Pero él,
sacudiendo la víbora en el fuego, ningún daño padeció. 6 Ellos estaban esperando que él
se hinchase, o cayese muerto de repente; mas habiendo esperado mucho, y viendo que
ningún mal le venía, cambiaron de parecer y dijeron que era un dios.
7 En aquellos lugares había propiedades del hombre principal de la isla, llamado Publio,
quien nos recibió y hospedó solícitamente tres días. 8 Y aconteció que el padre de Publio
estaba en cama, enfermo de fiebre y de disentería; y entró Pablo a verle, y después de
haber orado, le impuso las manos, y le sanó. 9 Hecho esto, también los otros que en la isla
tenían enfermedades, venían, y eran sanados; 10 los cuales también nos honraron con
muchas atenciones; y cuando zarpamos, nos cargaron de las cosas necesarias.
11 Pasados tres meses, nos hicimos a la vela en una nave alejandrina que había invernado
en la isla, la cual tenía por enseña a Cástor y Pólux.
Después de la tormenta y el naufragio que sufrió Pablo en Hechos 27 hubo un avivamiento
en Malta, en donde muchas personas experimentaron el poder de Dios y fueron sanas. En
medio de la tormenta, el Señor tenía un propósito para Pablo y por eso mismo salvó a
todos los tripulantes del barco. Hay un propósito mayor para tu vida por el que Dios te ha
salvado una y otra vez de cada tormenta que has vivido. Talvez no lo entiendas ahora,
pero llegará el día en que verás el avivamiento que Él preparó para ti.
Conclusión y aplicación
A veces pareciera que, aunque sigamos a Dios, no dejamos de experimentar tormenta tras
tormenta en nuestra vida. Y es que Él no nos prometió menos tempestades, pero sí que
4. estaría con nosotros aun en medio de ellas. No temas porque Dios está contigo y por más
atemorizante que parezca tu situación tiene un plan mayor para ti.
Llamado y ministración
No dudes que Dios está contigo. Cree que Su promesa prevalece y que en medio de lo que
estás viviendo podrás salir y testificar la obra que hizo en tu vida. Aún hay un propósito
que debes cumplir y el Señor te salvará por medio de él.
Intercesión
Marcos 11:23
Dios no nos abandona, por eso creamos por milagros que moverán montes. Oremos por
las personas, para que adopten una fe sólida y fuerte, libre de dudas.
Ofrenda
Jueces 6:17-18
En el tiempo de Gedeón el pueblo era esclavo y reunía comida prácticamente a
escondidas, pero esto no fue impedimento para que presentaran una ofrenda a Dios. Aun
en medio de las circunstancias adversas nuestra generosidad provoca las bendiciones de
nuestro Padre.