1. INTRODUCCIÓN
El control de flujo en un programa Java puede hacerse mediante las ya conocidas sentencias
estructuradas (if, while, return). Pero Java va mucho más allá, mediante una técnica de programación
denominada gestión de excepciones.
Mediante las excepciones se podrá evitar repetir continuamente código, en busca de un posible error,
y avisar a otros objetos de una condición anormal de ejecución durante un programa.
Durante este capítulo estudiaremos la gestión de excepciones y errores, sin pretender profundizar
demasiado, pero sí fijando la base conceptual de lo que este modo de programación supone.
Mediante la gestión de excepciones se prescindirá de sentencias de control de errores del tipo:
if ( error == true )
return ERROR;
Las excepciones señalan errores o situaciones poco habituales en la ejecución de un programa, por
ejemplo una división de un valor entre cero, un intento de acceso a un String declarado, pero no
instanciado, etc.
Habitualmente, en programación, se incluyen tantas instrucciones condicionales como sea necesario
para conseguir que una aplicación sea robusta, de esta manera, por ejemplo, en cada división de un
valor entre una v ariable, antes se comprueba que el denominador no sea cero:
...............
Denominador = ..............
if (Denominador != 0) {
Numerador = ................
Resultado = Numerador / Denominador;
}
else
System.out.println (“No se puede realizar la división”);
.................
Utilizando el mecanismo de excepciones que proporciona Java, en nuestro ejemplo, en lugar de
incluir una serie de instrucciones condicionales para evitar las distintas divisiones entre cero que se
puedan dar, se escribe el programa sin tener en cuenta esta circunstancia y, posteriormente, se
escribe el código que habría que ejecutar si la situación “excepcional” se produce:
2. Al hacer uso de excepciones, el bloque que codifica la porción de aplicación resulta más sencillo de
entender, puesto que no es necesario incluir las instrucciones condicionales que verifican si puede
darse la situación de excepción. En definitiva, si utilizamos el mecanismo de excepciones, podemos
separar la lógica del programa de las instrucciones d e control de errores, haciendo la aplicación más
legible y robusta.
Las excepciones son objetos (clases) que se crean cuando se produce una situación extraordinaria
en la ejecución del programa. Estos objetos almacenan información acerca del tipo de situación
anormal que se ha producido y el lugar donde ha ocurrido. Los objetos excepción se pasan
automáticamente al bloque de tratamiento de excepciones (el inferior de nuestro gráfico) para que
puedan ser referenciados.