Una fractura expuesta es una fractura ósea que comunica el hueso fracturado con el exterior a través de una herida en la piel. Estas fracturas pueden contaminarse si no se tratan dentro de las 6 horas o infectarse si pasan más de 12 horas sin atención médica. El examen físico es importante para diagnosticar este tipo de fracturas y determinar el tratamiento adecuado.