La ciencia avanza a pasos gigantes, cada vez tenemos más inventos que mejoran nuestra calidad de vida, antes podíamos hablar solamente de trasplantes de órganos vivos, hoy lo podemos hacer también de órganos artificiales.....
El corazón artificial busca reemplazar al corazón humano cuya capacidad se ve disminuida hasta llegar a ser insuficiente debido a malformaciones congénitas o a enfermedades como las obstrucciones arteriales, las infecciones o los infartos. Los primeros intentos de construir una máquina que realizara sus funciones fueron hechos en la década de 1940. Se trataba de máquinas externas que no solamente bombeaban la sangre del paciente sino que además permitían oxigenarla en el transcurso de operaciones de corazón.
2. Un corazón artificial es una prótesis que
se implanta en el cuerpo para reemplazar
al corazón biológico. Es distinto de una
máquina de bypass cardiopulmonar
(CPB), que es un dispositivo externo
utilizado para proveer las funciones del
corazón y los pulmones. El CPB oxigena
la sangre, y por lo tanto no es preciso se
encuentre conectado a ambos circuitos
sanguíneos. Además, un CPB es
adecuado para ser utilizado solo durante
algunas pocas horas, mientras que se
han utilizado corazones artificiales por
períodos que exceden un año. de uso
3. CORAZÓN ARTIFICIAL TOTAL: (por sus sigla en
inglés TAH) su implantación requiere la extracción
del corazón nativo. Es un procedimiento de cirugía
similar a un trasplante de corazón con un donante
humano de corazón.
DISPOSITIVO DE ASISTENCIA CARDÍACA: (por sus
siglas en inglés VAD) no se debe extraer el corazón
del paciente durante la implantación, sino que el
dispositivo se coloca junto al corazón existente para
brindar un soporte adicional mientras el órgano se
recupera. Los dispositivos de asistencia ventricular
pueden brindar soporte al ventrículo izquierdo
(LVAD, Left Ventricular Assist Device), al ventrículo
derecho (RVAD, Right Ventricular Assist Device') o a
ambos ventrículos (BiVAD, Biventricular Assist
Device). A diferencia de la implantación del TAH, el
dispositivo de asistencia provee solo una parte del
trabajo total desarrollado por el corazón del
paciente.
4. Un reemplazo sintético del corazón es una de las aspiraciones más
anheladas de la medicina moderna. El beneficio obvio de un corazón
artificial funcional sería reducir la necesidad de trasplantes de
corazón, ya que la demanda para donantes de corazones siempre es
mayor que la oferta (situación que sucede con todos los órganos).
Si bien el corazón es conceptualmente simple (en su esquema más
básico es un músculo que funciona como una bomba), posee una
serie de características intrínsecas que hacen muy complejo su
emulación mediante materiales sintéticos y fuentes de suministro
de energía. Estas dificultades dan lugar a una serie de consecuencias
que pueden complicar la implantación de un corazón artificial.
Algunas complicaciones incluyen el rechazo del trasplante (debido a
que el organismo detecta la presencia de un cuerpo extraño), la
necesidad de tomar anticoagulantes de forma permanente, y la
necesidad de utilizar baterías externas que limitan la movilidad del
paciente a horas o días.
5. En 1937 en Rusia V.P. Demichov implantó versiones
de TAHs en perros. TAH del tipo bomba de rodillos
TAH (dentro del pecho) con el eje motor que
atravesaba el esternón. En 1957 Tet Akutsu y
Willem Kolff iniciaron un amplio programa de
investigación sobre TAH en la Clínica Cleveland.
En 1958 Domingo Liotta comenzó estudios de
reemplazo por TAH en Lyon, Francia y en 1959-60
en la Universidad Nacional de Córdoba en la
Argentina. Presentó su trabajo en una reunión de la
"American Society for Artificial Internal Organs"
que se realizó en marzo de 1961 en Atlantic City. En
dicha reunión el Dr Liotta describió el implante de
tres tipos TAH ortopodicos (dentro del saco
pericardial) en perros, cada uno de los cuales
utilizaba una fuente de energía externa diferente:
un motor eléctrico implantable, una bomba
rotatoria implantable con un motor eléctrico
externo y una bomba neumática.
6. El sistema de "Dispositivo de asistencia
ventricular derecha" (LVAD) fue creado por
Domingo Liotta en la Baylor University
College of Medicine en Houston en 1962
En la tarde del 19 de julio de 1963 E. Stanley
Crawford y Domingo Liotta implantaron el primer
LVAD clínico en el Hospital Metodista en Houston,
Texas en un paciente que sufrió un paro cardiaco
después de una cirugía. El paciente sobrevivió 4 días
con la asistencia mecánica pero no se recuperó de
las complicaciones del paro cardiaco, finalmente la
bomba fue desconectada y el paciente murió.
7. En la tarde del 12 de abril de 1966 Michael
DeBakey y Domingo Liotta implantaron el
primer LVAD clínico en una posición
extracorporea (la bomba externa se ubica al
costado del paciente) en el hospital Metodista
en Houston en un paciente con shock cardíaco
después de una cirugía del corazón. El paciente
desarrolló complicaciones neurológicas y
pulmonares y murió después de unos pocos días
de soporte mecánico LVAD. En octubre de 1966
Michael E. DeBakey y Domingo Liotta
implantaron el LVAD extracorporeo Liotta-
DeBakey en otro paciente que se recuperó sin
problemas, y que fue dado de alta del hospital
después de 10 días de soporte mecánico.
convirtiéndose de esa manera en el primer uso
exitoso de un LVAD para shock post
cardiotomia.
8. Durante la tarde del 4 de abril de 1969 Denton A. Cooley y Domingo
Liotta le reemplazaron el corazón a un hombre moribundo por un corazón
mecánico ubicado dentro de su pecho, esta operación se realizó a modo
de puente para permitir un trasplante en el Texas Heart Institute en
Houston. El paciente se despertó y se recuperó sin problemas. Después
de 64 horas el corazón artificial impulsado por medios neumáticos fue
extraído siendo reemplazado por el corazón de un donante. Reemplazar
el corazón artificial más tarde se demostró no fue una decisión adecuada.
Treinta y dos horas después del trasplante el paciente falleció de lo que
más tarde se determinó fue una infección pulmonar aguda, que se
extendió a ambos pulmones, causada por hongos, muy probablemente
producto de las drogas inmuno depresoras que se le habían sumnistrado.
Si hubieran dejado el corazón artificial es probable que el paciente no
hubiera fallecido.