2. ¿Hola mamá, cómo estás? Yo muy bien,
gracias a Dios.
Hace apenas algunos días que me
concebiste en tu barriguita.
3. Realmente, no puedo explicar lo feliz
que me siento de que tú vayas a ser mi
mamá.
¡Todo parece
indicar que seré el
niño más feliz del
mundo!
Otra cosa que me llena de orgullo es
ver el amor con que fuí concebido.
4. Mamá, ya hace un mes que fui
concebido y comienzo a ver
cómo mi cuerpecito empieza a
formarse, yo sé que no soy tan
bonito como tú, pero ¡dame
una oportunidad! ¡Estoy muy
feliz! Pero hay algo que me
preocupa...
Últimamente he notado que
hay algo rondando en tu
cabeza que no me deja dormir,
pero está bien, eso pasará,
no te desesperes.
5. Mamá, ya pasaron dos meses y medio, estoy muy
contento con mis nuevas manos, ya tengo ganas de
usarlas para jugar.
6. Mamita, ¿Me dices qué pasa?
¿Por qué lloras tanto todas las noches?
¿Por qué cuando papá y tú se encuentran, se gritan
tanto uno al otro?
¿Ya no me quieren? Voy a hacer todo lo posible para
que me quieran...
7. Ya pasaron tres meses, mamá, te noto muy
deprimida, no sé lo que está pasando, estoy muy
confundido.
Hoy por la mañana fuimos al médico y el nos dio una
cita para mañana...
No sé para qué, yo me siento muy bien...
¿Acaso tú te sientes mal, mamá?
8. ¡Ah! ¿Qué hace ese tubito en mi casita?
Mamá, ya es de día, ¿A dónde vamos?
¿Qué está pasando mamá?
Mamá, no te acuestes, apenas son las dos de
la tarde, no tengo sueño, quiero seguir
jugando con mis manitas.
¿Es un nuevo juguete? ¡Mira!
Oye, ¿Por qué están sorbiendo mi
casita?
9. ¡Mamá! Espere... ¡Esa es mi manita!
¿Señor, por qué la arrancó?
¿No está viendo que me lastima?
¡Mamita, defiéndeme!
Mamita, ¡Ayúdame!
¿No vé que aún soy muy pequeño para defenderme
solito?
Mamá, mi piernita, ¡La están arrancando!
10. Diles que se detengan, te juro que ya voy a
portarme bien y no voy a darte más
patadas.
¿Cómo es posible que un ser humano
pueda hacer esto conmigo?
Él me las pagará cuando yo sea grande y
fuerte, ¡Ay, mamá! Ya no aguanto más...
ay... mamita, mamita, ayúdame...
11. Mamá, ya han pasado
varios años desde aquél
día, y desde aquí arriba
observo cómo todavía
te duele haber tomado
aquella decisión.
Por favor, ya no llores,
acuérdate de que te
amo y que aquí estaré
esperándote con
muchos besos y
abrazos.
¡Te amo mucho!
Tu bebé.