1. Mérida, 29 – 07 – 2014
Instituto Universitario de Tecnología Cristóbal Mendoza
Participante: Luis Alfredo Gil Castellano
Radiación Solar y su influencia en el hombre, Plantas y Animales:
La radiación solar es el flujo de energía que se recibe del Sol en forma de
ondas electromagnéticas de diferentes frecuencias (luz visible, infrarroja y
ultravioleta). Aproximadamente la mitad de las que se recibe, comprendidas entre
0.4μm y 0.7μm, pueden ser detectadas por el ojo humano, constituyendo lo que se
conoce como luz visible. De la otra mitad, la mayoría se sitúa en la parte infrarroja
del espectro y una pequeña parte en la ultravioleta. La porción de esta radiación
que no es absorbida por la atmósfera, es la que produce quemaduras en la piel a
la gente que se expone muchas horas al sol sin protección. La radiación solar se
mide normalmente con un instrumento denominado piranómetro.
Los efectos de la radiación solar sobre el hombre dependen de las
características individuales, de la piel expuesta, la intensidad, la frecuencia y el
tiempo de exposición, que a su vez dependen de la localización geográfica,
estación del año, periodo del día y condición climática. Sus efectos pueden ser
beneficiosos al ser humano, como sensación de bienestar, estímulo a la
producción de la melanina (pigmento localizado en las células externas de la piel)
con el consecuente bronceado, tratamiento de la ictericia, etc. Sin embargo,
cuando no se toman los cuidados debidos en cuanto a la radiación solar recibida,
también puede afectar al organismo. Los efectos dañinos de la luz solar se deben
a su contenido de radiación ultravioleta (UV), la que se ha dividido en 3 zonas (A,
B y C) según su longitud de onda y contenido de energía. El 5% de la radiación
UV sobre la superficie terrestre corresponde a la UVB (280-320 nm) y el 95% a la
UVA (320-400 nm). La UVC (<280 nm) es una radiación portadora de elevada
energía, característica que la torna extremadamente dañina a los seres vivos.
Felizmente, nada de radiación UVC y sólo una pequeña fracción de UVB llegan a
la superficie terrestre, pues ambas son absorbidas por la capa de ozono.
2. Las plantas utilizan la luz solar para elaborar la energía que necesitan, razón
por la cual no pueden crecer si se las coloca en medio de una habitación oscura.
Cuanta más luz se proporcione a las plantas de interior, más saludables y felices
serán. Básicamente, las plantas emplean la luz, para elaborar azúcares, muy
similares a la glucosa, que más tarde se convertirá en los elementos químicos que
necesitan para un crecimiento sano y vigoroso, la coloración verde de las hojas
(denominada clorofila) absorbe la energía solar; esta energía es utilizada
posteriormente para combinar el dióxido de carbono del aire con agua para la
elaborar azúcares; este proceso recibe el nombre de fotosíntesis. Al mismo
tiempo, la planta despide oxígeno a través de las hojas. Durante la noche, la
planta deja de elaborar azúcares. Absorbe el oxígeno del aire que la rodea, y
transforma los azúcares almacenados en energía para su crecimiento.
El concepto de radiación solar expresa que es el conjunto de todas las
radiaciones electromagnéticas que el Sol emite. Prácticamente es luz y calor que
tiene efectos en la Tierra, y existen diferentes tipos. Es particularmente percibida
cuando la radiación directa no es bloqueada por las nubes y la luz del sol brilla
durante el día, de lo contrario, se experimenta como luz difusa. La radiación solar
se presenta en forma de ondas electromagnéticas que se producen desde el
núcleo del Sol y se propagan hacia todas direcciones. La longitud y frecuencia de
dichas ondas son factores esenciales para determinar su energía, visibilidad y
poder de penetración. La radiación electromagnética se emite en la mayor parte
del espectro electromagnético, la radiación solar tiene una importancia vital en el
suministro de energía para las funciones en la Tierra, y afecta los procesos físicos
y químicos de los seres vivos.