2. Ciudad minera adaptada a sus valles y montañas, Zacatecas refleja su
atractivo en sus hermosas construcciones que son verdaderas obras
de arte.
3. Por su arquitectura y traza urbana, así como la irregularidad de la
alineación de sus calles, constituyen el esplendor de su Centro
Histórico reconocido por la UNESCO.
4. Atraviesa el centro de Zacatecas a través del teleférico, admirando los
bellos monumentos de cantera rosa de la ciudad.
Recorre la legendaria mina El Edén a bordo de un tren subterráneo
que llega hasta las entrañas del estado, pasa por puntos cruciales
como una capilla, el Museo de los Minerales y otros sitios interesantes.
5. Iglesia de Fátima, el Mercado González Ortega, la Catedral, la Mina El
Edén, la Iglesia de Guadalupe, la Ex Plaza de Toros San Pedro y el Ex
Templo de San Agustín.
6. Cerca de Zacatecas se asientan las zonas arqueológicas de La Quemada y
Altavista, las más representativas de la región. La Quemada es el asentamiento
prehispánico más grande del sur de Zacatecas. También conocido como
Chalchihuites, una palabra náhuatl que significa "piedra preciosa", se localiza
56 kilómetros al sur de la capital por la carretera federal 70. Su moderno
museo de sitio alberga un modelo a escala que reconstruye en casi un
kilómetro cuadrado la forma en que lució la ciudad en sus días de esplendor.
La urbe se desarrolló entre los años 300 y 1200 d.C. Sus construcciones, que
se asientan a 800 metros sobre una colina, muestran características comunes
a otras culturas mesoamericanas. El vestigio presenta distintas etapas de
construcción, y en él se pueden apreciar edificios que se superponen a los
antiguos. Los edificios cívicos y religiosos fueron diseñados con rasgos
arquitectónicos innovadores para su tiempo. Dos estructuras que destacan son
el Templo de las Columnas y la Pirámide Votiva.
7.
8. Los primeros asentamientos de La Quemada datan del 200 al 300 d.C. La
población vivió su esplendor alrededor del año 500, y la ciudad fue abandonada
400 años después. Poco se sabe del destino de sus pobladores desde entonces.
Algunos historiadores del siglo XVIII afirman que esta urbe perteneció a la
fugaz cultura chicomostoc, aunque la complejidad de su arquitectura permite
suponer que en realidad perteneció a otra cultura más desarrollada.
Una red de caminos de lozas y barro se extiende desde La Quemada hasta unos
200 sitios asentados sobre el valle de Malpaso. Entre los proyectos de
construcción fechados entre 650 y 850 d.C. está la Cámara de las Columnas,
una de las estructuras techadas más grandes de Mesoamérica.
Desafortunadamente, hoy únicamente quedan en pie las 28 columnas. No dejes
de visitar la escalera de Gamio, que dirige al nivel superior de la pirámide; la
Pirámide del Sol, el Templo de los Cráneos (Tzompantli) y el Laberinto. En
Altavista harás mucho más que pasear junto a las construcciones: podrás
involucrarte en actividades relacionadas con la astronomía y que te permitirán
conocer más sobre fenómenos como eclipses y equinoccios.
9.
10. Del lado izquierdo de la catedral se halla la Plaza de Armas, que data del siglo XVIII. El
majestuoso edificio que se encuentra al norte es la exresidencia del gobernador, una casa de
dos plantas en estilo neoclásico. Al este de la plaza se asienta el Palacio de Gobierno, edificado
en 1727, originalmente una residencia privada. Su exterior es blanco y se mezcla con cantera
rosa y elegantes balcones de hierro forjado. En su interior se encuentra un mural en el que el
artista Antonio Pintor Rodríguez retrató con detalle la historia del estado.
Al cruzar la calle te encontrarás frente a dos edificios: el Emporio Zacatecas y el Palacio de la
Mala Noche. Este último es una residencia del siglo XVIII cuya fachada blanca se adorna con
balcones y ventanas de piedra labrada. Frente de la catedral se encuentra el mercado González
Ortega, una elegante construcción de columnas negras de hierro muy acorde a la moda de
1889, año en que fue construido. Hoy, este recinto alberga una docena de modernas tiendas,
boutiques y un local que ofrece vinos producidos en la región. El acueducto Del Cubo data de
finales del siglo XVIII. Sus 39 sólidos arcos de cantera rosa, que alguna vez proveyeron de agua
a la ciudad, hoy engalanan la entrada sur.
Uno de los tesoros más apreciados de Zacatecas es el decimonónico Teatro Calderón, un
elegante edificio de tres plantas cuyo exterior es de estilo francés con influencia Art Nouveau.
El interior aloja una suntuosa combinación de maderas, esculturas de bronce y una elegante
alfombra roja.