La isla Palmerston es la isla habitada más remota del mundo, con solo 62 residentes que han vivido allí durante más de 150 años. Ubicada en el Océano Pacífico como parte de las Islas Cook, la isla recibe suministros dos veces al año en un viaje de nueve días en barco desde otras islas. Los habitantes comparten recursos y trabajan juntos en una vida pacífica a pesar de la falta de tiendas, baños limitados y agua de lluvia, y el aislamiento de la isla, que cuenta con una iglesia y electricidad