Obra de teatro

1. ¡QUE LIO CON ESTE TIO!
OBRA DE TEATRO PARA TITERES
EN UN ACTO
Autor: Mario Ruiz Rodríguez.
Personajes:
Mane - primer hermano
Rulo - segundo hermano
Dorico – tercer hermano
Piricueto buen lío – Tío que se hace pasar por Fortunino
Mensajero.-
Escenografía: la sala de una casa de clase media baja. Estilo provinciana.
Los habitantes de la casa se encuentran activos por la visita inesperada de su tío
Piricueto que tienen muchos años de no verse.
Mane.- (Entrando) ¿Que pasa por tanto alboroto?..... (Mirando para todos lados, la casa
hecha un desorden.) …. ¿Qué, nadie me escucha?
Rulo.- Con permiso, que tengo mucha prisa, (Mane, no lo deja pasar, le interrumpe el
paso)
Mane.- ¿Me podrías decir que es lo que esta pasando?
Rulo.- ¿Que no estas enterado?
Mane.- No, no estoy enterado….¿me puedes explicar, de que no estoy enterado, y por
que todos andan como locos?
Rulo.- El tío Piricueto Buen Lío, viene de visita.
Mane.- Oye Rulo, ¿estas seguro que el tío Piricueto Buen Lío, viene de visita?.
Rulo.- Clarines descompuestos, así lo dice la carta que recibí hoy por la mañana, el tío
Piricueto viene.
Mane.- No puede ser, ahora que las cosas estaban mejorando, tenia que venir el Tío
Piricueto, tenemos que ponernos en calma para ver como lo vamos a recibir y ¿a que
se debe su visita inesperada? si desde hace muchos años no nos vemos.
Rulo.- Por esa razón todos andamos a la carrera, asegurando de que todo este en orden.
Por cierto Mane, ¿Me puedes traer un vaso de agua y dejarlo por aquí para poner
algunas flores.
Mane.- Con mucho gusto, te traeré el vaso de agua. (Sale)
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2. Rulo.- Mientras veré que todo este en orden, es verdad ¡A que vendrá en tío Piricueto
Buen Lío! Si desde que murió nuestro padre nunca más lo hemos visitado.
Mane.- Aquí esta el agua. ¿Dónde la Pongo?
Rilo.- ¡Cuidado! No la vayas a tirar, ¡Cuidado!
Mane.- (El agua y el vaso van a dar a suelo) uy, uy, uyuyuy. Rataplan, el agua de cayó.
Rulo.- Te lo dije, eres muy torpe.
Mane.- Iré por mas… ya regreso (timbran a la puerta y se detiene)
Rulo.- (sin inmutarse) Están tocando el timbre.
Mane.- Si eso parece. (Nuevamente se escucha el timbre)
Rulo.- Otra vez, están tocando el timbre.
Mane.- Si, otra vez, y nadie abre.
Rulo.- Deja, yo iré a abrir, tu me traes el vaso que te pedí. Y mucho cuidado, no lo vaya
a tirar.
Mane.- (Sale) si, tendré mucho cuidado, voy por el agua.
Rulo.- (Inseguro) Será el tío Piricueto, …no creo, es muy temprano.
Mane.- (Entra con el vaso de agua) ¿Quién era? (coloca el vaso)
Rulo.- No, no he abierto (vuelve a timbrar, los tiemblan)
Mane.- Voy abril.
Rulo.- ¡Yo abro!. (Los dos intentan abril y en el intento tropiezan)
Rulo.- Si serás, ¡te dije que yo abriría!
Mane.- Discúlpame, hermanito.
Rulo.- Mira hasta el agua tiraste otra vez.
Mane.- No me fije, voy a traer otro vaso, y tendré mucho cuidado.( timbran) Voy abrir.
Rulo.- No, permíteme, yo abro.
Mane.- Esta bien, Yo pongo las flores, ¿Dónde están?( Sale)
Rulo.- Están en el comedor, por favor quítales el papel.
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3. Rulo.- Pase, ¿que se le ofrece?
Mensajero.- Buenas tardes, casa de la familia Buen Lío.
Rulo.- Si Aquí es.
Mensajero.- Les traigo un búcaro y una carta. ¿Me puede recibir?
Rulo.- desde luego.
Mensajero.- Donde pongo esto.
Rulo.- Déjelo sobre ese mueble.
Mensajero.- (deja el búcaro Y sale) Con su permiso.
Rulo.- (sale el mensajero y se dispone a leer) Queridos sobrinos
Mane.- (entrando) aquí están las flores, se verán muy bien en este lugar.
(Se queda viendo a Rulo por un buen rato, no interrumpe hasta que termina de leer) y
esa carta, ¿De quien es?
Rulo.- Es del tío Piricueto Buen Lío.
Mane.- ¿Qué dice?
Rulo.- No puedo creer lo que aquí dice.
Mane.- Pero, que esperas para decirme, dime ¿y ese búcaro, que significa?
Rulo.- Espera, y escucha lo que dice.
Mane.- ¡Vamos!, di pronto, que ya no resisto la curiosidad.
Rulo.- Escucha: Queridos sobrinos, me fue difícil llegar como ustedes lo esperaban.
En el búcaro que les envió están mis cenizas.
Mane.- ¡Que cosa dices!…. ¿En este búcaro están las cenizas de nuestro tío Piricueto?
¡Que miedo! (intenta salir)
Rulo.- ¡Espera!, ¡no seas miedoso!… continúo con sus deseos.
Mane.- Apúrate, que mas dice….
Rulo.- Como no cuento con más parientes, les suplico, coloquen mis restos en un lugar
visible, durante un año y después las arrojan en el campo para que sirva de abono, al
finalizar recibirán la herencia que les dejo.
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4. Mane.- ¡La herencia que nos deja! ¿Cual herencia?
Rulo.- Se que están sorprendidos de mi inesperada presencia, sigan las instrucciones de
mi carta al pie de la letra, si todo sale bien, la herencia es de ustedes.
Mane.- De que habla el tío, sigue, que mas dice, a que se refiere con eso de la herencia.
Rulo.- Después de recibir el búcaro, llegará un invitado, quiero que lo atiendan como
Si fuera yo mismo y hagan todo lo que les pida.
Mane.- Que miedo, tener esto, aquí en la casa, y para el colmo tener que atender a un
invitado, que ni siquiera conocemos ¿Quién será?... no entiendo nada.
Rulo.- Atentamente su tío Piricueto Buen Lío, ¡tenemos que hacer lo que nos pide! (Se
miran) ¡todo por la herencia!.
Mane.- Bueno por lo pronto lo colocaremos en este lugar, donde puse las flores. Ya
veremos después que hacemos.
Rulo.- Voy a avisarle a Dorico.
Mane.- (queda solo) ahora que vamos a hacer con esto aquí en la casa, espero no salga
el espíritu del tío Piricueto, a asustarnos. (Sale con miedo) hay nanita.
Dorico.- (entra junto a Mane) No puedo creer lo que me dices, ¿Dónde esta ese búcaro?
que mencionas.
Rulo.- Ahí lo tienes, ese es y tenemos que tenerlo en casa durante un año, para poder
obtener la herencia.
Dorico.- ¡Eso es todo lo que tenemos que hacer!.
Rulo.- Espera, todavía hay más.
Dorico.- ¡¡Todavía hay más!! … que mas, si se puede saber.
Rulo.- Tenemos que seguir las instrucciones que en la carta nos menciona.
Dorico.- ¿y que es lo que pide?
Rulo.- Vendrá una persona, invitado por el tío.
Dorico.- Una persona invitado por el tío, ayyyy…¿Quién es? ¿Cómo se llama?
Rulo.- No se, en la carta no dice, y Tenemos que hacer todo lo que nos pida.
Dorico.- ¿Y también estará el tiempo que el búcaro permanezca aquí?
Rulo.- Así es, el mismo tiempito, ¿como la ves?
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5. Dorico.- No se si lo podré soportar, tantos años viviendo solos sin ninguna molestia,
pero por una herencia, seré capaz de hacer ¡todo lo que me pidan!
Rulo.- Bendita herencia, ¿y de cuanto será esa ya famosa herencia?
Dorico.- Pues, ¡el tío era muy rico!, ha de ser una gran fortuna, ahora si podremos
comer como Dios manda.
Rulo.- Y podremos comprar un carro, para todas las necesidades que tenemos.
Dorico.- (Sale) ahora tendré con que disfrutar mas de esta vida. ¡Bendita herencia!
Como caída del cielo, cuando más lo necesitábamos (sale)
Mane.- (Entra) ¿Que le pasa a Dorico?... lo veo muy contento.
Rulo.- Le he contado lo del tío Piricueto y la herencia.
Mane.- Espero que no sea otra de las bromitas que el tío estaba acostumbrado hacer.
Rulo.- No lo creo, esto es muy serio, jugar con la muerte, es como para tener un poquito
de temor.(timbran).. Están timbrando ¿Quién será?
Mane.- Recuerda lo que dice la carta del tío…. Seguramente ha de ser esa persona que
invito, y ya ha llegado. ¡Abramos!
Rulo.- ¡abramos! No lo hagamos esperar…..Yo abro, mientras tu, prepara la comida.
Que ha de traer hambre.
Mane.- Esta bien, ya vuelvo.
Rulo.- (timbran) ya voy, no se desespere, ya abro la puerta.
Piricueto.- Disfrazado) Buenas tardes,
Rulo.- Buenas tardes, ¿Qué se le ofrece?
Piricueto.- Buenas tardes tengan en esta casa. Yo soy fortunino, invitado por mi amigo
Piricueto, en paz este.
Rulo.- Pase, tome asiento, a de estar cansado del viaje.
Piricueto.- así es hijo, muy cansado. Ya leyeron la carta que les mando su tío.
Rulo.- Si, precisamente, en estos momentos estábamos hablando de eso.
A todo esto, podría contarme, ¿como fue que el tío lo invito a nuestra casa?, ¿Cuándo
fue eso?
Piricueto.- Precisamente cuando mi amigo Piricueto se encontraba en su lecho de
muerte me dijo. Mira amigo Fortunino, quiero que vayas a casa de mis sobrinos y los
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6. ayudes a cumplir con mis deseos, para que puedan recibir toda mi herencia,
completita.
Y yo le prometí que cumpliría con sus deseos, por esa razón, aquí estoy cumpliendo.
Rulo.- Sea bien venido, voy a buscar a mis hermanos.
Piricueto.- Anda, ve hijito, por mi no te preocupes…(sale Rulo) ahora a preparar bien el
plan y darme la gran vida con este trío de tontos, que con tal de recibir la herencia harán
lo que yo les pida. ¡Cual herencia! Si toda me la he gastado, dándome la gran vida y
ahora no tengo ni en que caerme muerto, pero aquí si que pasare mis últimos años (Se
oyen ruidos) parece que ya vienen.
Dorico.- Buenas tardes señor, se puede saber ¿quien es usted?
Piricueto.- Yo soy Fortunino, amigo de Piricueto Buen Lío, que en su gloria este.
Dorico.- A que bien, que gusto conocerlo, que extraño que mi tío halla hecho todo este
arreglo antes de morir, si nunca nos frecuentábamos. (A parte) este sujeto esta un poco
raro.
Piricueto.- No se, hijito, yo solo cumplo con lo que le he prometido al difunto.
Dorico.- ¡Por que mi tío siempre fue muy bromista!, y de la herencia, ¿que me cuenta?,
¿tenia mucho dinero?
Piricueto.- De eso si no se decirte nada, yo no estaba enterado de sus negocios, quizás
sea una buena herencia. En fin eso a mi no me corresponde.
Dorico.- Lo dejo, don Fortunino (a parte) esto me esta dando muy mala espina, a mis
hermanos podrá engañar pero lo que es a mi no. Vamos a seguirle el jueguito a este
viejito, para mi que, este se trae algo entre manos.
Piricueto.- Antes de que te vayas hijito, me podrías traer un vaso de leche. Lo
acostumbro antes de pasa al comedor a tomar los alimentos.
Dorico.- Claro, (aparte) ya empezó el jueguito, tenemos que cumplir lo que el tío nos
ha pedido.(va saliendo)
Piricueto.- Tengo que tener mucho cuidado, este, no es tan tarugo como los otros dos.
Mane.- (entrando) ¿Decía?
Piricueto.- Nada hijito, solo estaba pensando en voz alta. Decía, ¡que bonita ciudad!
pero, que calor hace.
Mane.- Es la temporada del calor, en el día hace calor y por la noche refresca un poco.
Piricueto.- ¿A que hora se come en esta casa?
Mane.- Ya vamos a comer a eso vengo, puede pasar, la comida esta servida.

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(Salen y entra Dorico)
Dorico.- No se por que, pero yo, a este señor lo conozco, no se de donde y como, pero
lo conozco… Voy a planear una buena estrategia, para asustarlo y descubrir, cual es su
plan.
Piricueto.- (Entrando) No pasaste a comer Doriquito, te estuvimos esperando.
Dorico.- ¿Como dijo?
Piricueto.- ¡Que te estábamos esperando! (a parte) que tarugo, por poco me descubro.
Dorico.- (A parte) Que raro, solo el tío Piricueto, me decía Doriquito.
Voy a comer.
Piricueto.- Ya no vayas, no quedo nada, todo nos lo comimos, pensamos que no quería
comer.
Dorico.- No importa mas tarde comeré algo (Aparte) a que viejito, ya empezó a comerse
todo la comida. ¡Oiga don Fortunido!, no le contaron mis hermanos que en esta casa
espantan.
Piricueto.- ¡Espantan!... no, no me dijeron tal cosa, pero no te preocupes, yo no soy
miedoso.
Dorico.- Bueno yo se lo digo, por que aquí, precisamente donde usted se va a quedar a
dormir, se aparece un hombre sin cabeza.
Piricueto.- ¿Y que mas mi hijo? No le han preguntado ¿que es, lo que quiere?
Dorico.- No, ya estamos acostumbrados a vivir con el, así que no nos molesta.
Piricueto.- Ahora regreso voy al baño. (Sale con miedo)
Dorico.- Ja, ja, ja, ja,
Rulo.- (entrando) ¿Qué te pasa? ¿Te estas riendo solo?
Dorico.- No hombre, me río, del viejo Fortunino.
Rulo.- ¿Qué hizo? Para que te diera tanta risa.
Dorico.- ¿Que no te has dado cuenta?
Rulo.- ¿Cuenta de que?
Dorico.- De que ese tal Fortunino, no es más que el mismito tío Piricueto Buen Lío.
Rulo.- ¿Que estas diciendo?

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Dorico.- Lo que oyes, el mismismito.
Rulo.- En este momento, se lo digo a Mane.
Dorico.- ¡Espera! Sigámosle el juego.
Rulo.- ¿Y que es lo esta pensando hacer?
Dorico.- Engañarnos. Y vivir a nuestras costillas.
Rulo.- No puede ser, si tiene mucho dinero, ¿Por qué quitarnos lo poco que tenemos?
Dorico.- Pero que tonto eres, este vejete, no tiene ni un peso partido por la mitad.
Y quiere que lo mantengamos. Ya decía yo, que esto estaba muy raro.
Rulo.- Se lo voy a decir a Mane de todos modos. Para ver que hacemos.
Dorico.- ¡Espera!, ya lo tengo planeado todo.
Rulo.- ¿Cual es tu plan?
Dorico.- Le he dicho que aquí aparece un hombre sin cabeza, esta noche, cuando este
dormido, lo voy a venir a asustar y lo haré que salga por donde entro, confesando toda
la verdad. Ya veras.
Rulo.- Hay que decírselo a Mane, para que nos ayude con el plan.
Dorico.- Ya viene,
Piricueto.- Hay hijito, perdona las molestias, me puedes decir ¿donde me acomodo?
Dorico.- Aquí, don Fortunino, en esta cama, espero que pase buena noche.
Piricueto.- Gracias hijito… Será verdad lo que me ha dicho, ese condenado de Dorico, o
solo lo dijo para asustarme.(se acuesta, tratando de dormir) mmm, mmm,
Efecto de noche y aparece el hombre sin cabeza.
Hombre sin cabeza.- Ay, que triste estoy, aaay, pero que triste estoy. AAAY PERO
QUE TRISTE ESTOY.
Piricueto.- (como es un poco sordo) ¿Quién anda ahí?
Hombre sin cabeza.- Soy yo, Que triste estoy, que triste estoy.
Piricueto.- (asustado) ¿Que eees lolo que quieres?
Hombre sin cabeza.- Estoy triste, muy triste.

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Piricueto.- ¿Yyyyyyy por quuuue estás triste?
Hombre sin cabeza. Por que no encuentro mi cabeza.
Piricueto.- ¿Y donde la dejaste?
Hombre sin cabeza.- La he perdido por decir mentiras.
Piricueto.- ¿Por decir mentiras?
Hombre sin cabeza.- Así es por decir mentiras, he recibido el castigo de la muerte.
Piricueto.- ¿De la muerte?
Hombre sin cabeza.- Si eso fue lo que dije. La muerte no soporta a los mentirosos.
Piricueto.- ¿Por quuuue no looos soporta?
Hombre sin cabeza.- por que se burlan de la gente inocente y buena.
Piricueto.- ¿ yooo que tengo quuue veeer con esoo?
Hombre sin cabeza.- Te lo digo, como una advertencia. Para que no digas mentiras.
Piricueto.- ¿Una advertencia?
Hombre sin cabeza.- Si, una advertencia, a la gente mentirosa se los lleva la muerte.
Piricueto.- La muuuuueeeeerte.
Hombre sin cabeza.- La muerte, anda por aquí cerca, tal vez, venga por algún
mentiroso.
Piricueto.- Pero yo no soy mentiroso.
Hombre sin cabeza. Ya te lo he advertido, a dios ya me tengo que ir.
Piricueto.- ¡Espera!...(para el publico) La muerte viene por los mentirosos, y yo les he
mentido a mis sobrinos, ahora que hago, si la muerte se presenta.
Muerte.- Hola, Piricueto, ¿Estas cómodo, viviendo a costillas de tus sobrinos?
Piricueto.- No, perdón querida muerte, no me haga daño.
Muerte.- No te voy hacer daño, vengo por ti para que me ayudes.
Piricueto.- ¿Para que te ayude?
Muerte.- Si, para que me ayudes, ya estoy muy cansada, y necesito un ayudante.

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Piricueto.- No yo no puedo, estoy muy ocupado.
Muerte.- No lo creo, si puedes, tienes todo el tiempo, no tienes nada que hacer. Solo
vivir a costillas de tus sobrinos.
Piricueto.- y si no quiero, que me harás.
Muerte.- Tendrás que penar por todo el mundo, con hambre y desnudo.
Piricueto.- Nooooo, yo mejor me voy y que me perdonen mus sobrinos. (Sale corriendo)
Muerte.- ¡Espera! No te vayas, tan de prisa, ¡espera!.
Rulo.- Ja, ja, ja, ¡mírenlo como corre!
Mane.- Ja, ja, ja, Querernos engañar, para vivir a nuestras costillas.
Dorico.- Pobre tío, le salio el tiro por la culata.
Rulo.- Con esto tiene para no regresar, ja, ja, ja,
Mane.- Hermanos, no les parece que hemos sido muy duros con el tío Piricueto Buen
Lío.
Rulo.- Tiene razón Mane. Ahora que lo dices, y pensándolo bien, hemos sido mas
ingratos nosotros.
Dorico.- No se preocupen, ya veremos como lo ayudamos, pero esa no es una buena
manera, para vivir de otros, ¿o si?
Mane.- Si tienes toda la razón, esa no es la forma, ¡si nos lo hubiera dicho, que
necesitaba de nosotros!, eso hubiera sido otro cantar.
Rulo.- Por esta ocasión dejémoslo así, y pidámosle, a nuestro amiguitos, que harían
ellos si se encontraran en una situación como la de el tío Piricueto Buen Lío.
Y Colorin Colorado este cuento se ha terminado.
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