1. El telescopio es un instrumento que permite observar objetos distantes,
amplificando la imagen generalmente a través espejos cóncavos. La
palabra telescopio, proviene del griego. Tele significa lejos y, skopien,
mirar.
Un telescopio puede ser considerado, como un aparato que aumenta el
tamaño angular de los objetos distantes y asimismo, el brillo que estos
emiten. Es por lo mismo, que el telescopio es utilizado en la astronomía,
para poder ver los cuerpos celestes alejados de la tierra. Asimismo, un
telescopio recolecta y enfoca la radiación electromagnética.
Un telescopio funciona por medio de uno o varios espejos cóncavos o
curvos, los cuales captan la luz de los objetos lejanos o la radiación
electromagnética. Esta luz captada por el telescopio o la radiación, es
llevada a un foco, en el cual se crea la imagen definitiva.
Es por medio de este sistema, que la imagen puede ser observada por los
astrónomos, como asimismo, fotografiada para investigaciones futuras.
Anteriormente, estábamos hablando, que existe un telescopio que capta
la radiación electromagnética. Pues bien, este funciona por medio de
antenas, las cuales tienen la forma de un plato cóncavo y que apuntan en
diferentes direcciones hacia el cielo (dependiendo del lugar donde se
encuentren); estas antenas captan las ondas de radio provenientes del
espacio. Por lo general, estos tipos de telescopios no operan solos, sino
que son varias las antenas emplazadas en lugares estratégicos, las cuales,
todas, apuntan hacia un punto determinado del firmamento. Los pulsares
y galaxias activas, entre otros objetos celestes, emiten radiaciones que
pueden ser captadas por estos telescopios y de esta manera hacerse
visibles. Estos estudios han ampliado enormemente nuestra comprensión
del universo. Además, se utilizan para el monitoreo de sondas espaciales y
para proyectos de búsqueda de vida extraterrestre, como es el caso del
SETI (search for extra-terrestrial inteligence o búsqueda de inteligencia
extraterrestre).
Con respecto a la historia del telescopio, esta se remonta al siglo X. Don de
los árabes
El arado, es una herramienta de hierro utilizada en la agricultura para
preparar y remover el suelo antes de sembrar las semillas. Se puede
considerar como la evolución del pico y de la azada. En un principio el
2. arado era tirado por personas, luego por bueyes o mulas, y en algunas
zonas por caballos, actualmente también los tractores tiran de ellos. Arar
aumenta la porosidad, que favorece el crecimiento de las plantas, aunque
al remover el suelo se pierde agua por evaporación y algo de suelo por
erosión, y las eventuales lluvias lavan los nutrientes y abonos que puedan
haberse aplicado al suelo, generando pérdidas.
El arado surgió posiblemente en Mesopotamia. El arado tradicional tirado
por animales procede del arado romano, que consta de una esteva (para
guiar) y reja (de hierro) que es la que rompe el terreno.
El arado Rotherham fue construido en Inglaterra en 1730. Su forma
triangular hizo más fácil tirar de él y se adaptó para ser tirado por caballos.
Fue construido por el holandés Joseph Foljambe y marca el comienzo de
su fabricación industrial.