Este documento presenta fotografías históricas de cuando las Cataratas del Niágara se congelaron en 1911, mostrando el agua congelada y personas paradas en el lecho del río, un evento que nunca ha vuelto a ocurrir. Las imágenes muestran el impactante espectáculo de las cataratas completamente congeladas y el agua cayendo en estado sólido, ilustrando lo extremadamente frío que debió ser el invierno para lograr detener y congelar el flujo de agua.