2. Los candidatos al
encuentro amoroso en
Internet tienen de
sobra donde elegir.
¿Vas en busca de una
historia seria, de una
relación, o de un lío
pasajero, de un flirteo
virtual? ¡En unos pocos
click, puedes
seleccionar los perfiles
que te interesan!
3. lgunos anuncian claramente de qué estilo
son, están destinados a encuentros pícaros.
Otros se basan en las afinidades y los gustos
culturales. Los más conocidos (meetic, match...)
se parecen más a verdaderos supermercados de
encuentros con un amplio abanico de
elección, y por ello se necesita tiempo para
seleccionar las respuestas. Finalmente, otros
portales como parship te ponen, después de
un test de personalidad, en relación con las
personas “compatibles”.
4. He aquí algunos criterios de elección en función de
lo que esperas:
- La selección automática de perfiles que te
interesan
Una vez tu inscripción ha sido validada, el portal
te busca regularmente a las personas que
responden a tus criterios, lo que te evita tener que
hacerlo tu misma, pero pueden descartar algunas
personas que podrían interesarte.
- La posibilidad de chatear en directo o sólo por e-
mail
Todo depende de si prefieres tomarte tu tiempo
para redactar tus e-mails o aprender a conocer a la
gente en el fuego de la “conversación”.
5. - El acceso restringido a tu perfil en función de
ciertos criterios
Esto puede limitar el número de encuentros ¡pero
permite ganar en calidad!
- La verificación de las informaciones
Es una funcionalidad propuesta por ciertos
portales para eliminar a aquéllos que camuflan
ciertos detalles embarazosos, por ejemplo si son
solteros, o incluso padres de familia.
A destacar: la mayoría de los portales de pago
proponen gratuitamente un cierto número de
servicios a las mujeres que, generalmente, se
inscriben en minoría.
6. - Si lees los eslóganes de ciertos portales, el 80% de sus
usuarios encuentran en ellos a una persona, y los
happy-end son, de hecho, numerosos. Internet permite
encontrar a personas que no verías en la vida real y
aprender a conocer a gente antes de encontrarlos de
veras.
- Las personas que salen de una decepción o que están
heridas por una ruptura también pueden encontrar
aquí una cura para su amor propio viendo, con unos
pocos click, el interés que suscita su perfil.
- Los portales de encuentros presentan también la
ventaja de indicar claramente lo que se pretende, sus
miembros están ahí para encontrar gente y, sobre
todo, después de una cierta edad, decididos a poner fin
a una vida de soltero.
7. - Sin embargo, la multiplicidad de los perfiles
propuestos puede conducir a una cierta actitud
consumista, quedando siempre a la espera por si
aparece un perfil mejor y quedando, por lo
tanto, siempre decepcionada.
- El encuentro virtual en Internet, inversión de
muchos sueños y esperas, puede estar
contaminado por la tentación de construirse otra
personalidad, otro estatus social del que se tiene en
la vida real... Tentación a la cual está expuesta
también la persona que está frente a ti. Entre el
chat, más o menos íntimo, y el encuentro real, ¡la
desilusión puede darse en la cita!
8. Ya está, ya han hablado
durante más o menos
tiempo por
Internet, habéis
intercambiado vuestros
números de teléfono y
os habéis citado. Ahí
estás tú, emocionada
con la idea de encontrar
a tu príncipe, que te
envía asiduamente e-
mails desde hace un
mes. ¿Cómo evitar caer
en manos de una
“rana”?
9. Realizando previamente una verdadera selección. Por
supuesto, filtrar todas las proposiciones que se reciben en
las que falta romanticismo y en las que da la impresión de
preparar entrevistas de trabajo, pero si, por ejemplo, para ti
el nivel cultural es muy importante, no esperes encontrar a
tu hombre entre los que te envían e-mails llenos de faltas de
ortografía.
> Del mismo modo, pedir una foto puede evitar ciertas
desilusiones.
En el mundo virtual, como en el real, nadie está a salvo de
una decepción, pero en Internet, como todo el mundo sabe,
se es especialmente vulnerable a este tipo de desengaño,
sobre todo si se han puesto muchas expectativas en una
relación virtual que no resiste más de 30 segundos a la
experiencia de la realidad.
10. En efecto, los portales de encuentros, a pesar de
que dan la impresión de ser un depósito inagotable
de solteros, no proporcionan amor al toque de una
varita mágica y no pueden reducir el tiempo
necesario de duelo al final de una historia y antes
de comenzar otra. Una historia de amor seria, ya
comience en un mundo virtual o real, supone ser
bastante independiente para no estar en situación
de falta afectiva.
> Para manejar mejor el momento del verdadero
encuentro, es importante desdramatizarlo, no
poner demasiadas esperanzas y expectativas en la
persona que está frente a ti.
11. No está ahí para llenar una carencia o responder
perfectamente a tus expectativas, sino que te encuentras con
ella para aprender a conocerla y, eventualmente, ir más
lejos.
Internet facilita los primeros pasos de una relación, el del
encuentro y el de la toma de contacto, pero no suprime el
tiempo necesario para aprender a conocerse, y ofrecer al
otro un lugar en su vida, preludio, si las ganas están ahí y
son compartidas, a un compromiso total.
Mientras esperas, déjate cortejar, sobre todo si tu
pretendiente ha conseguido fácilmente una cita contigo.
Aprender a conocer verdaderamente a la otra persona es el
mejor medio para evitar una gran decepción más adelante.