1) El documento es un comunicado semanal del 14 de junio de 2011 de Andrés Manuel López Obrador sobre su reunión con mexicanos en Los Ángeles para informarles sobre el Movimiento Regeneración Nacional y sus esfuerzos para lograr el renacimiento de México. 2) López Obrador explica que después del fraude electoral de 2006, decidieron seguir luchando de manera pacífica para lograr una transformación profunda en México en lugar de usar la violencia. 3) También habla sobre su visión de promover una política exterior distinta con Estados
AMLO anuncia política exterior distinta para México
1. COMUNICADO SEMANAL
14-Junio-2011
Amigas y Amigos de Puebla:
El pasado domingo 12 de junio me reuní en Los Ángeles, California, Estados Unidos, con
paisanas y paisanos nuestros para informarles, en representación de muchos mexicanos, mujeres y
hombres que formamos parte del Movimiento Regeneración Nacional (MORENA), sobre lo que
estamos haciendo para lograr el renacimiento de México.
Comencé diciéndoles que, a partir del fraude electoral de 2006, luego que nos robaron la
Presidencia de la República, en circunstancias muy difíciles, tomamos la decisión de seguir
luchando hasta lograr la transformación del país, de nuestro México. Como ustedes comprenderán,
en esos momentos teníamos varias opciones. Había varios caminos. Muchos ciudadanos mexicanos
indignados y molestos por el fraude exigían que fuéramos al fondo, que actuáramos con energía y
que por ningún motivo se permitiera la imposición de Felipe Calderón.
Esto implicaba movilizaciones y tomas de instalaciones estratégicas que, muy probablemente, nos
iban a llevar al enfrentamiento y al derramamiento de sangre. Ese camino lo rechazamos, porque
nuestro movimiento ha sido, es y seguirá siendo pacífico; así lo demuestran los hechos: a pesar de
que se trató de un tremendo agravio, hemos actuado con absoluta responsabilidad. En todo este
tiempo no se ha roto un vidrio, ni nadie puede decir que por culpa nuestra una sola persona haya
perdido la vida.
Además, consideramos que la violencia no es el camino para transformar a México. Nunca vamos a
caer en la trampa de provocar el enfrentamiento entre hermanos. Los potentados, que son los que
realmente dominan, si se desatara una revuelta ni siquiera darían la cara, mandarían a policías y
soldados que también son pueblo: forman parte de familias pobres que, inclusive, simpatizan con
nuestra causa. Más aun, la vía de la confrontación, por lo general, no cambia el fondo de las cosas.
Ahí está el ejemplo reciente de Egipto. En 18 días de movilizaciones hubo 800 muertos. Se logró, es
cierto, la caída del dictador Mubarak, pero actualmente gobierna una junta militar, y nosotros lo que
queremos es un cambio profundo. No se trata de quitar a unos para poner a otros, iguales o peores,
sino de lograr una renovación tajante de la vida pública.
Otra opción que teníamos era aceptar el fraude, con lo cual hubiésemos actuado como traidores. Ello
hubiese significado cancelar por completo la vía democrática, aceptar en los hechos que sólo unos
cuantos pueden decidir quién sí y quién no debe gobernar, anulando el derecho del pueblo a elegir
libremente a sus autoridades.
También pudimos, después del fraude, hacernos a un lado, retirarnos a nuestras casas y, si acaso,
volver a participar, “a correr”, como le llaman allá, en futuras elecciones.
Afortunadamente, lo que decidimos fue seguir luchando hasta lograr la transformación de la vida
pública del país. Y qué bueno que actuamos de esa manera, porque de haber claudicado, o peor aun
si hubiésemos transado con la mafia en el poder, hoy no existiría este movimiento que, gracias a la
perseverancia de hombres y mujeres libres y conscientes, es la única esperanza para la mayoría de
los mexicanos, sobre todo, para los más pobres y desposeídos.
www.amlo.org
www.amlo-puebla.org/
2. También fui a Los Ángeles, California, a decirles que cuando triunfe nuestro movimiento, que va a
triunfar más temprano que tarde, vamos entonces a promover una política exterior distinta, desde
luego, a la actual, sobre todo en lo que respecta a la posición del gobierno de México con el gobierno
de Estados Unidos.
Al respecto, doy a conocer algunas definiciones básicas:
1. Vamos a mantener una relación de respeto con el gobierno de Estados Unidos, haciendo valer,
en todos los casos y bajo cualquier circunstancia, nuestra soberanía. México nunca será base militar,
protectorado ni colonia de ningún país extranjero.
2. Conviene a las dos naciones que haya cooperación para el desarrollo, no cooperación militar. Es
equivocado pensar que países vinculados por la historia y la cultura y con tres mil kilómetros de
frontera, puedan resolver sus problemas con muros, con militarización, con razzias, con
deportaciones, con discriminación racial y con violación a derechos humanos. Desde ahí, desde Los
Ángeles, manifieste que en lugar del Plan Mérida y de que nos entreguen armamento y helicópteros,
vamos a proponerles, que si realmente quieren ayudarnos, que participen con créditos, no usureros y
sin condiciones vergonzantes, para proyectos de desarrollo regional en nuestro país, orientados a
reactivar la economía, a crear empleos y a evitar que nadie, por necesidad, tenga que verse obligado
a emigrar. Vamos a hacer entender que la mejor política migratoria para Estados Unidos dependerá
siempre del desarrollo de México.
3. Desde ahora, exhorto de manera respetuosa al presidente Barack Obama para que cumpla su
compromiso de campaña de regularizar la situación migratoria de millones de mexicanos que trabajan
honradamente en Estados Unidos. Entiendo que está de por medio la cuestión electoral y que hay
en este país una oposición conservadora que se niega a reconocer los derechos de los migrantes y
que incluso, han optado por la persecución y el racismo. Pero todos debemos entender, todos los
seres humanos, independientemente de razas y fronteras, que por encima de las fronteras, están los
derechos universales del hombre, el derecho a la libertad de palabra, el derecho a la libertad de
cultos; el derecho a vivir libres de miseria y el derecho a vivir libres de temor; derechos fue fueron
proclamados desde los años cuarenta, precisamente, por ese titán de las libertades, ese presidente
gigantesco, precursor de la política de la buena vecindad, Franklin Delano Roosevelt, uno de los
mejores presidentes que ha habido en Estados Unidos.
Voy a regresar. Visitaré otras ciudades de la Unión Americana. Les he pedido que nos ayuden, de
ese lado de la frontera, a informar, orientar, concientizar y organizar al pueblo. Hay que crear los
comités del Movimiento Regeneración Nacional, e invitar a que nos ayuden como protagonistas del
cambio verdadero.
¡Vivan los trabajadores migrantes!
¡Viva el pueblo de México!
¡Viva el Movimiento Regeneración Nacional!
¡Viva México!
¡Viva México!
¡Viva México!
Lic. Andrés Manuel López Obrador (edit)
www.amlo.org
www.amlo-puebla.org/