El documento describe la tradición antigua de la castañeada, una comida familiar celebrada después de cenar el Día de Todos los Santos dedicada a los muertos. Tradicionalmente se comían castañas asadas, dulces como los panellets, y vino dulce o blanco, mientras que también se consumía el boniato, un tubérculo parecido a la batata. Con el tiempo, apareció la figura de la castañera durante esta época.
19. Otra historia:
Antiguamente, después de cenar, se
celebraba la castañeada, comida familiar
dedicada a los muertos y que era recuerdo
de las antiguas comidas funerarias. Se
hacía la cena habitual y seguidamente se
comían las castañas asadas al fuego del
hogar, así como los “panellets” u otros
dulces propios del día, y se bebía vino que
tenía que ser dulce o blanco. Las castañas
se abocaban encima de la mesa y todo el
mundo iba cogiendo a su discreción.
Esta costumbre de comer castañas (que
por otro lado es el fruto típico de la
estación junto con otros frutos secos:
almendras, avellanas…), se complementa
con la de consumir un tubérculo parecido a
la batata: el boniato. Poco a poco hará su
aparición uno de los personajes más
carismáticos y entrañables de esta época:
la castañera.