El documento es una letra de canción que habla sobre un peregrino que se dirige a la iglesia de San Gil para cumplir con la promesa de cantar alabanzas a sus santos. Mientras sigue el camino polvoriento hacia la cruz, lleva una flor para el altar como ofrenda de su canto. Cuando ya se escucha el violín llamando a los peregrinos a cumplir con sus promesas, el hombre expresa su gran fe y devoción hacia San Gil.