1. 'La red social' un filme sobre el creador de Facebook
El rey del imperio en la web
Por: Liliana López Sorzano
Celos, envidia, poder, amistad y dinero son algunos de los temas de esta producción que se
estrena hoy en las salas del país.
Foto: Sonypictures
Jesse Eisenberg en el papel de Mark Zuckerberg (izq.) y su socio Eduardo Saverin, interpretado por Andrew
Garfield.
“La película no es sobre Facebook, igual que Don Quijote no es sobre molinos. La red
social es una historia antigua de lealtad y traición, amistad, envidia, poder social”, afirma
Aaron Sorkin, guionista de esta producción que ha despertado toda clase de polémicas y
que ha recibido los bálsamos de la critica, especialmente en Estados Unidos.
La cinta La red social cuenta la historia de los inicios de Facebook y la vida de su
creador, Mark Zuckerberg, el joven más rico del mundo según la lista Forbes y el
dueño del fenómeno más significativo de la red en los últimos tiempos, que
revolucionó la forma en que la gente del mundo se relaciona.
El filme, dirigido por David Fincher (Se7en, El club de la pelea, El curioso caso de
Benjamin Button), logra crear hilos de tensión que lo convierten en una fascinante
historia de suspenso respaldada por la excelente interpretación llena de
2. verosimilitud de Jesse Eisenberg encarnando a Mark Zuckerberg, que lo hace
aparecer en la pantalla extravagante y anodino, héroe y perdedor, leal y traidor, y
que plantea la paradoja de un ser poco social que se convierte en el rey de las
relaciones en el mundo.
No es un documental, no son personificaciones, es una película de ficción que
tanto Fincher como Sorkin basaron en investigaciones, fuentes públicas,
entrevistas y expedientes legales, para crear su propia perspectiva pero sin tener
acceso a su creador directamente.
Zuckerberg ha disentido con la película, en general, excepto con la ropa que
utiliza el personaje. En una conferencia en la Universidad de Stanford afirmó: “Es
interesante ver cómo se enfocaron en la realidad de ciertas cosas. Cada camiseta
y cada chaqueta que tiene el protagonista son prendas que aún tengo”. Por otra
parte, no está de acuerdo con las intenciones que plantea la película para crear
Facebook: necesidad de agradar a las mujeres y de ser aceptado en los clubes
exclusivos de las universidades, ese mundo de cofradías de machos alpha phi
beta llamados fraternidades. “Los de la película no pueden captar en sus cabezas
la idea de que alguien puede crear sólo por el gusto de hacerlo”, sostuvo
Zuckerberg.
Sin embargo, la película no pretende dar una mala imagen ni de Zuckerberg ni de
Facebook. Es atinada justamente en mostrar a un personaje complejo y
contradictorio que al final de cuentas plantea más preguntas que respuestas.
En la pantalla las imágenes pasan rápido, las palabras de los actores son
acertadas, inteligentes y despiertan más de una sonrisa. Es un relato atractivo,
lejos de ser plano, que se adentra en las pasiones humanas tan antiguas como la
misma historia pero en la era digital. Muestra las batallas de autoría de ese
pequeño gigante llamado Facebook, que pasó de 500 usuarios a 500 millones y
sigue creciendo... ¡Bum! La bomba cibernética y, detrás de ella, un chico de 19
años con chanclas y sudadera.
Según Fincher, Zuckerberg creó Facebook para construir un aparato que le
permitiera conectarse con el mundo de una forma en que es incapaz de hacerlo en
su propia vida. Pero esto es tan sólo una opinión y una cara de la moneda.