La autopsia deriva del griego "ver por uno mismo" y es un procedimiento médico que examina un cuerpo después de la muerte para determinar la causa. Se realizan autopsias forenses en casos de muerte sospechosa o por preocupaciones de salud pública, o cuando alguien muere sin atención médica. El procedimiento de una autopsia implica examinar el cuerpo exteriormente y los órganos internos, pesarlos y guardarlos, para luego emitir un informe final sobre la causa de la muerte.