1. Amada María Otero Rosas se debate entre
superarse y separarse. Porque su separación de
Leonardo es el punto de partida de una
tormentosa historia que ella como buena
protagonista, está obligada a superar.
Sus cinco años de matrimonio más que un
lustro fueron un lastre. Un túnel oscuro del que
sale sin hijos, sin casa, sin carro, sin nada
propio, porque hasta su amor propio se lo Ilevá
en el divorcio, un tipo que a pesar de todo no
podemos odiar porque es lo que las mujeres
llaman iun hombre encantador! . Y no se
equivocan: Leonardo es un encantador ,pero
de serpientes y hace ya algún tiempo sostiene
una tormentosa relación con Linda Arbeláez, su
amante y aliada.
Amada sale del matrimonio en ruinas porque,
para más colmo, su ex esposo y la vieja que se lo
quita, son sus compañeros de trabajo en Velvet,
empresa de cosméticos que debe abandonar,
renunciando a su carrera de ventas.
La historia se pone mejor cuando se consuma el
desquite. Amada regresa al hogar paterno,
donde es reeibida a regañadientes por una
familia más que unida, hacinada, que sólo le da
dolores de cabeza.
Amada también tiene su soporte emocional. De
su lado juegan EIsa y Margarita, dos amigas de
toda la vida que la adoran. Tiene, además, una
voz interior que podr-íamos llamar su polo a
tierra, se llama Miranda y la visita en momentos
de reflexión ya sea paraJ orientarla o para todo lo
contrario.
La historia tiene final feliz. Amada funda en su
propia casa una agencia matrimonial que
alcanza el éxito, y la lleva además a presentar
su espacio de orientación sentimental en
televisión: Amada, experta en amores .
¿y el amor? Amada al final lo encuentra justo
donde debió haberlo buscado desde el principio.