1. HOMBRE VERDADERO
Recuerdo que uno de mis profesores, el Ing. Martinez, usaba una frase con la que arengaba a sus
alumnos a entregar su mejor esfuerzo en la realización de tareas y proyectos; esta era: ¡¡ Háganse
Hombres!!
Esta frase parecía un poco chocante para algunos jóvenes, que la entendían como un insulto o como una
ofensa, pues la sugerencia parecía indicar que eran, a saber, lo contrario; pero entendían el mensaje
cuando él aclaraba “actúen como verdaderos Hombres” y daba su definición: “Hombre es aquel que
entrega lo mejor de sí, en cada aspecto de su vida”
Después de algunos años he entendido su concepto en un sentido más amplio. Hombre, es aquel capaz de
entregar en cada momento del día y en cada momento de su vida, su mayor y mejor esfuerzo en todas las
cosas que hace, tanto en el aspecto moral, intelectual, y físico. Hombre es aquel capaz de hacerse
responsable de las decisiones tomadas, sean buenas o malas. “Actuar como hombre” es vivir con valentía
y esfuerzo a pesar de que las circunstancias nos llamen a vivir con preocupación y constante temor.
Sabiendo esto, acepto y a veces uso sus arengas como un estimulo contra el desaliento, el desánimo y
hasta contra la tristeza y dolor que muchas situaciones traen a nuestra vida.
El famoso Apóstol Pablo, al escribir una de sus cartas a los cristianos de Corinto les exhortó de forma
similar: “Velad, estad firmes en la fe; portaos VARONILMENTE, y esforzaos 1 Corintios. 16:13 RV60.
Velad, esforzaos”
Mantener una actitud positiva ante las circunstancias, esforzarse a pesar del desaliento o del tamaño de
la empresa que nos espera es un requisito para alcanzar el éxito en la vida.
Si damos una mirada rápida a nuestro alrededor, encontraremos motivos que justifiquen, sobremanera,
nuestro desanimo, desaliento y nuestro temor; ya sea por las circunstancias o por acciones de las
personas que nos rodean. Pero la mayor verdad que descubrí en mi vida, es que si existe un momento en
el que necesitas actuar y vivir con valor, ser esforzado y resuelto, entregar lo mejor de ti y usar el mayor
esfuerzo intelectual, físico o espiritual, es precisamente ese momento en el que todo, absolutamente todo
justifica el desaliento y el desánimo. Es entonces que debemos “Hacernos Hombres”, “Actuar
Varonilmente”, vivir con valor y entregar lo mejor de nuestras facultades en la tarea de cambiar las
circunstancias desfavorables y lograr las metas y los sueños que nos fijemos.
Cada día de nuestra vida enfrentaremos circunstancias y barreras que nos exigirán entregar lo mejor de
nosotros para vencerlas, o si no caer derrotados. Portarse con hombría, es hacer uso de todas las
facultades que poseemos. Esa debe ser la conquista de todo hombre que busca alcanzar el ideal que Dios
tiene para él.
Quiero compartir contigo, un poema inspirador, del Nobel de literatura Rudyard Kipling, en la versión de
Efrén Rebolledo (la mejor versión que he leído) se titula “SI”
“Si puedes estar firme cuando en tu derredor Si todas tus ganancias, poniéndolas en un
todo el mundo se ofusca y tacha tu entereza montón, las arriesgas osado en un golpe de
Si cuando dudan todos, fías en tu valor, y al azar y las pierdes
mismo tiempo sabes excusar su flaqueza Y luego con bravo corazón, sin hablar de tus
Si puedes esperar y a tu afán poner brida, pérdidas, vuelves a comenzar.
o blanco de mentiras, Si puedes mantener en la ruda pelea, alerta
Esgrimir la verdad, o siendo odiado, al odio el pensamiento y el musculo tirante
no dejarle cabida, Para emplearlos cuando en ti todo flaquea,
Y ni ensalzas tu juicio, ni ostentas tu bondad. menos la voluntad que te dice: ¡ADELANTE!
Si sueñas, pero el sueño no se vuelve tu rey Si entre la turba, das a la virtud abrigo
Si piensas, pero el pensar no mengua tus Si marchando con reyes, del orgullo has
ardores triunfado
Si el triunfo y el desastre no te imponen su Si no pueden herirte, ni amigo ni enemigo
ley, y los tratas lo mismo, como a dos Si eres bueno con todos, pero no demasiado,
impostores Y si puedes llenar los preciosos minutos con
Si puedes soportar que tu frase sincera, sea sesenta segundos de combate bravío,
trampa de necios en boca de malvados Tuya es la tierra y todos sus codiciados
O mirar hecha trizas tu adorada quimera y frutos, y lo que más importa:
tornar a forjarla con útiles mellados. Serás HOMBRE, hijo mío.”
Vive cada día con valentía, esfuérzate, entrega lo mejor de ti, se Hombre; alcanza tus sueños y el sueño
que Dios tiene para ti.
Carlos Fernandez