1. El contador de cuentos!
El cuentacuentos!!
Adelante pasa, no te
quedes en el umbral de
la puerta, que afuera
hace frio, refúgiate con
nosotros al dulce aroma
del pan recién hecho en
el horno que esta junto
a la entrada de nuestra
casa, pasa, y comparte
con nosotros una
amena conversación,
pasa, no te quedes en el
umbral, que afuera
hace frio.
2. Este es mi barrio, mejor dicho estas son las casas de mi
barrio, son azules, con los tejados un poco color rojo y
las ventanas de color naranja, están todas muy juntitas
porque es invierno, hace mucho frio y está lloviendo, a
que parece blanditas? Claro! se han juntado tanto para
darse calor que hasta parece que se van a caer, pero
no!! Hay de todos los tamaños, pequeñas, más pequeñas
y grandes pero solo un poco más, aquí entre estas
casitas azules sucedieron algunas pequeñas historias, si
queréis os cuento una que tengo guardado en mi
pequeño baúl de los recuerdos una vivencia de antaño
maricastaño como decía alguien, que cada vez que me
acuerdo se me salta alguna lagrimita, el caso es que
siendo muy, muy pequeño que casi ni me acuerdo,
ocurrió que allí en el barrio en donde vivíamos un día
creo que fue por navidades apareció una mujer.
3. ¡¡¡ Cuentito de navidad que no es cuento que es verdad!!!
La nieve caía en grandes copos parecía que fuesen trozos
de algodón! desde detrás de la ventana de nuestra cocina se
veían caer lentamente posarse y desaparecer, el caso es que
cada vez crecía mas el manto de nieve. El día, la atmosfera
era gris de un gris que hacía ver las casas, más cercanas
como sumidas en la niebla, el olor a humedad de nieve era
tan grato que a todos nos incitaba a salir a la calle, yo
detrás de la ventana dibujaba corazones ♥ y dragones,
corazones ♥ atravesados por una flecha que ponía YoҲTi !!
y veleros con olas, hasta que las gotitas poco a poco se
encargaban de borrar el dibujo, cuando eso pasaba, salía
corriendo a la calle a revolcarme por la nieve con mis
hermanos y con todos los del barrio y a tirarnos bolas de
nieve, hacíamos túneles por dónde meternos y algún
muñeco tambien.
4. El caso es que en un momento dado vi aparecer entre los
copos de nieve, una mujer y creo que llevaba una maleta,
estaba perdida, porque el recuerdo que yo tengo es haberla
visto deambulando como sin saber a dónde ir, daba vueltas y
vueltas por el barrio, no sé donde pregunto ni a quien se
dirigió , el caso es que apareció por nuestra casa, el
siguiente recuerdo, es verla sentada en la mesa comiendo y
disfrutando al calor del hogar de una amena jornada. Se fue
y nunca más se lo que paso con esa especie de aparición
mágica, todavía, muy de vez en cuando viene a mi memoria
ese recuerdo y siempre lo relaciono con la solidaridad y la
buena armonía de la gente sencilla que con solo ofrecer
una sonrisa un poco de amistad y compañía a otros les hace
feliz.
.
5.
6. Bueno!! No sé si os ha gustado mi poemita y este cuentito de
navidad que no es cuento que es verdad!! Simplemente quería
contar algo que recuerdo muy vagamente, que no se si ocurrió en
la navidad o no, simplemente quería contarlo, a veces una vieja
imagen es suficiente para retroceder al pasado y traer una sonrisa
a los labios, pero la mayoría de las veces los recuerdos, esas viejas
emociones se nos quedan dentro y se pierden, no sabía cómo
hacerlo por eso lo he contado en forma de cuento. Bueno sea
como sea una cosa es cierta y es lo bien que me lo he pasado
montando esta pequeña historia este pequeño cuento.
Ahora mismo las casitas azules de mi barrio duermen
porque se ha hecho de noche, el firmamento lleno de
estrellas que titilan, y la luna que ya se oculta las
guardan, y nosotros cantando en esta noche,
despedimos un año y damos la bien venida a otro.
Fin