SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 2
Descargar para leer sin conexión
¿Cómo se divierten nuestros hijos?

Somos tres papás y mamás que queremos compartir una experiencia que vivimos
en una fiesta organizada por adolescentes de grado 11 de un colegio de Bogotá. Al
enterarnos    del evento y del corto tiempo que tomó su organización les
preguntamos a nuestros hijos si el Colegio estaba apoyando la organización del
mismo y si había adultos que los acompañarían. Nos comentaron que el Colegio
había prestado el nombre, que posiblemente asistirían algunos profesores y que
también irían los padres de cinco alumnos.       Nos ofrecimos a acompañarlos,
haciendo un gran esfuerzo, ya que nuestros hijos eran del Colegio y alguno del
grupo organizador del evento. Inicialmente la respuesta de ellos fue negativa,
puesto que pensaban que ante cualquier incidente que se presentara y eso dañaría
su imagen entre sus compañeros. Les dijimos que les ayudaríamos a que la fiesta
fuera mejor y no dimos cabida a un no.

Para mayor responsabilidad nuestra los padres de familia de los cursos inferiores al
enterarse de la asistencia de padres y madres al evento, se sintieron más
tranquilos y confiados y autorizaron con facilidad la asistencia de sus hijas. Como
el evento era fuera de la ciudad, había un transporte en buses para llevar a los
asistentes. Supimos, luego, por parte de uno de los padres que llevaron a su hija al
punto de encuentro, que algunos de los muchachos ya se encontraban allí
ingiriendo licor, sin embargo no había ningún adulto controlando esto y así se
desplazaron hacía las afueras de la ciudad.

Nosotros nos encontrábamos en el lugar del evento, con sorpresa vimos que del
grupo de profesores y padres que asistirían, sólo había uno, éramos cuatro para
responder ante cualquier eventualidad. Llegaron los buses con 200 personas
aproximadamente, los demás fueron llegando con sus padres que los dejaban a la
entrada, que es la orilla de una carretera.

A continuación narraremos cómo cuatro adultos asumimos la responsabilidad de un
evento con 700 niños y niñas entre 12 y 18 años.

El parqueadero del establecimiento comenzó a llenarse de asistentes, muchos, con
una botella de aguardiente en su mano, sabían que debían consumirla antes de
entrar al salón, los guardias de seguridad controlan a la entrada que no ingresen
con armas o con bebidas alcohólicas. Nos empezamos a preocupar al ver el gran
número de menores tomados, con la mirada perdida, caminando sin equilibrio y
peleando a la orilla de la carretera por donde pasaban vehículos y camiones a gran
velocidad, decidimos llamar al número 123 para solicitar apoyo de la policía en el
control de los menores de 18 años y para que les quitaran el licor. Inmediatamente
llegaron     tres agentes, muy amables, se pusieron a nuestra disposición,
comenzaron a pedir identificaciones para sorpresa nuestra muchos de ellos tenían
cédula o contraseña falsa, por la edad que reflejaban sus rostros y su actitud, esto
inhabilitó la acción de los policías, nos lo podían proteger y nosotros tampoco. Sin
embargo su presencia ayudó a poner orden en el parqueadero.

Al interior del establecimiento, en la zona contratada donde estaban bailando no se
les vendía licor a los menores de edad, pero existía un área VIP para los mayores,
que es de fácil acceso para todos en donde se vende licor, presentando cédulas y
contraseñas falsas. Pedimos a los encargados de seguridad del establecimiento y a
los dueños, quienes empezaron a contagiarse con nuestro actuar, ellos cerraron
todas las entradas e impidieron el acceso de los menores a la zona VIP. La persona
dueña de la miniteca, un muchacho joven, se nos acercó y nos comentó que al
principio cuando nos vio en el parqueadero se sorprendió, pues el maneja varios
eventos de jóvenes y menores durante los fines de semana y nos comentó que
nunca ve padres de familia acompañando estas fiestas. También nos dio un apoyo
decidido, por iniciativa propia fue con uno de los policías a buscar el lugar en donde
los jóvenes estaban comprando el licor, encontró una tienda cercana al
establecimiento en donde el dueño irresponsablemente les proporcionaba el trago
con facilidad, el lugar fue sellado.

Durante     las rondas que hicimos dentro del establecimiento, vimos también
MUCHOS niños, niñas y adolescentes que se divirtieron sin consumir alcohol ni
drogas. En un momento nos buscaron los jóvenes organizadores pidiéndonos
ayuda porque se estaban robando celulares y carteras y había peleas entre los
muchachos. La policía, nuevamente, acudió a nuestro llamado, les dimos
autorización para requisar a los jóvenes. Encontraron papeletas con cocaína y
algunos menores drogándose en los baños, droga que fue incautada por los
agentes. A los que se encontraban en grave estado de alicoramiento o drogados
fueran retirados de la fiesta por la policía, a los menores enfermos les pedíamos el
teléfono de sus padres y nos comunicábamos para informarles el estado de sus
hijo/a. Una de nosotros se ganó varios insultos por esto, pero no se dejó
amedrentar, sabía que estaba haciendo lo correcto. Siempre hubo buena educación
y el buen trato de la policía hacía los menores.

Finalmente a la 1:00 AM, hora en que se había establecido la salida de los primeros
buses hacia Bogotá, comenzó el nuevo reto brindar transporte a 700 asistentes,
solo había cinco buses, se mandaron primero a los más pequeños y a las niñas. Se
lograron contratar otros buses adicionales a los previstos y a las 3:00 AM pudimos
retornar a casa. Para alegría nuestra no sucedió ninguna tragedia y la mayoría de
los menores no se dieron cuenta de los impases. Los niñas organizadores, que al
principio no querían que asistiéramos, llamaron a esa hora a nuestros celulares
agradeciendo nuestra presencia y colaboración en la fiesta, nos decían: “gracias,
sin ustedes las cosas no habrían salido igual”.

Sentimos que aunque sean alumnos de once grado, e hicieron lo mejor que estaba
a su alcance, no se puede dejar en ellos una responsabilidad de tal magnitud. Hay
cosas que para futuros eventos pensamos que como padres y madres vamos a
seguir acompañando, desde la organización, para velar por temas como la
seguridad del lugar, las salidas de emergencia, la capacidad del lugar, la
ventilación, la asistencia médica y, finalmente, permitir que pueda divertirse
sanamente y no correr peligros.

Crónica escrita para M@il PaPaz 58 en septiembre de 2008, por padres de familia
que quisieron compartir su experiencia con otros, no se publican nombres, ya que
sólo se pretende ilustrar.

Más contenido relacionado

Destacado

Double V_MIDN CHANG_1APR2016_FINAL_NS412
Double V_MIDN CHANG_1APR2016_FINAL_NS412Double V_MIDN CHANG_1APR2016_FINAL_NS412
Double V_MIDN CHANG_1APR2016_FINAL_NS412David Chang
 
Bioplastic Container Cropping Systems Biodegradation of Biocontainers in Soil...
Bioplastic Container Cropping Systems Biodegradation of Biocontainers in Soil...Bioplastic Container Cropping Systems Biodegradation of Biocontainers in Soil...
Bioplastic Container Cropping Systems Biodegradation of Biocontainers in Soil...University of Nevada Cooperative Extension
 
ROBERT MARIA - Enterpreneurship cbse - 2 -
ROBERT MARIA - Enterpreneurship   cbse - 2 - ROBERT MARIA - Enterpreneurship   cbse - 2 -
ROBERT MARIA - Enterpreneurship cbse - 2 - Arise Roby
 
Meeting minutes - September
Meeting minutes - SeptemberMeeting minutes - September
Meeting minutes - SeptemberAnandji-Wade
 
How to prepare for a meeting with your supervisor (william paul quick)
How to prepare for a meeting with your supervisor (william paul quick)How to prepare for a meeting with your supervisor (william paul quick)
How to prepare for a meeting with your supervisor (william paul quick)Ray L. Sun
 
Water..landscape architecture
Water..landscape architectureWater..landscape architecture
Water..landscape architectureDeepak Sharma
 
Acquedotto Del Fiora Social Media Strategy
Acquedotto Del Fiora Social Media StrategyAcquedotto Del Fiora Social Media Strategy
Acquedotto Del Fiora Social Media StrategyFlavia Zunino
 

Destacado (9)

Double V_MIDN CHANG_1APR2016_FINAL_NS412
Double V_MIDN CHANG_1APR2016_FINAL_NS412Double V_MIDN CHANG_1APR2016_FINAL_NS412
Double V_MIDN CHANG_1APR2016_FINAL_NS412
 
Bioplastic Container Cropping Systems Biodegradation of Biocontainers in Soil...
Bioplastic Container Cropping Systems Biodegradation of Biocontainers in Soil...Bioplastic Container Cropping Systems Biodegradation of Biocontainers in Soil...
Bioplastic Container Cropping Systems Biodegradation of Biocontainers in Soil...
 
ROBERT MARIA - Enterpreneurship cbse - 2 -
ROBERT MARIA - Enterpreneurship   cbse - 2 - ROBERT MARIA - Enterpreneurship   cbse - 2 -
ROBERT MARIA - Enterpreneurship cbse - 2 -
 
4) dsw transformation journey mit no video-with notes
4) dsw transformation journey mit no video-with notes4) dsw transformation journey mit no video-with notes
4) dsw transformation journey mit no video-with notes
 
Meeting minutes - September
Meeting minutes - SeptemberMeeting minutes - September
Meeting minutes - September
 
IoT in Motion: Creation of the “Glass Pipeline”
IoT in Motion: Creation of the “Glass Pipeline”IoT in Motion: Creation of the “Glass Pipeline”
IoT in Motion: Creation of the “Glass Pipeline”
 
How to prepare for a meeting with your supervisor (william paul quick)
How to prepare for a meeting with your supervisor (william paul quick)How to prepare for a meeting with your supervisor (william paul quick)
How to prepare for a meeting with your supervisor (william paul quick)
 
Water..landscape architecture
Water..landscape architectureWater..landscape architecture
Water..landscape architecture
 
Acquedotto Del Fiora Social Media Strategy
Acquedotto Del Fiora Social Media StrategyAcquedotto Del Fiora Social Media Strategy
Acquedotto Del Fiora Social Media Strategy
 

Similar a Como se divierten nuestros hijos

Similar a Como se divierten nuestros hijos (20)

PUBLICADO EN EL HERALDO DE CHIHUAHUA
PUBLICADO EN EL HERALDO DE CHIHUAHUAPUBLICADO EN EL HERALDO DE CHIHUAHUA
PUBLICADO EN EL HERALDO DE CHIHUAHUA
 
Padres malos
Padres malosPadres malos
Padres malos
 
Padres Malos
Padres MalosPadres Malos
Padres Malos
 
Padres Malos
Padres MalosPadres Malos
Padres Malos
 
Padres Malos
Padres MalosPadres Malos
Padres Malos
 
Padres malos
Padres malosPadres malos
Padres malos
 
Padres Malos
Padres MalosPadres Malos
Padres Malos
 
Padres Malos
Padres MalosPadres Malos
Padres Malos
 
Padres malos
Padres malosPadres malos
Padres malos
 
Padres malos
Padres malosPadres malos
Padres malos
 
Padres Malos
Padres MalosPadres Malos
Padres Malos
 
Padres Malos
Padres MalosPadres Malos
Padres Malos
 
Padres Malos
Padres MalosPadres Malos
Padres Malos
 
2.2
2.22.2
2.2
 
Padres Malos
Padres MalosPadres Malos
Padres Malos
 
Padres Malos
Padres  MalosPadres  Malos
Padres Malos
 
Monografia de sexualidad
Monografia de sexualidadMonografia de sexualidad
Monografia de sexualidad
 
Padres Malos
Padres MalosPadres Malos
Padres Malos
 
Padres malos
Padres malosPadres malos
Padres malos
 
Padres Malos
Padres MalosPadres Malos
Padres Malos
 

Como se divierten nuestros hijos

  • 1. ¿Cómo se divierten nuestros hijos? Somos tres papás y mamás que queremos compartir una experiencia que vivimos en una fiesta organizada por adolescentes de grado 11 de un colegio de Bogotá. Al enterarnos del evento y del corto tiempo que tomó su organización les preguntamos a nuestros hijos si el Colegio estaba apoyando la organización del mismo y si había adultos que los acompañarían. Nos comentaron que el Colegio había prestado el nombre, que posiblemente asistirían algunos profesores y que también irían los padres de cinco alumnos. Nos ofrecimos a acompañarlos, haciendo un gran esfuerzo, ya que nuestros hijos eran del Colegio y alguno del grupo organizador del evento. Inicialmente la respuesta de ellos fue negativa, puesto que pensaban que ante cualquier incidente que se presentara y eso dañaría su imagen entre sus compañeros. Les dijimos que les ayudaríamos a que la fiesta fuera mejor y no dimos cabida a un no. Para mayor responsabilidad nuestra los padres de familia de los cursos inferiores al enterarse de la asistencia de padres y madres al evento, se sintieron más tranquilos y confiados y autorizaron con facilidad la asistencia de sus hijas. Como el evento era fuera de la ciudad, había un transporte en buses para llevar a los asistentes. Supimos, luego, por parte de uno de los padres que llevaron a su hija al punto de encuentro, que algunos de los muchachos ya se encontraban allí ingiriendo licor, sin embargo no había ningún adulto controlando esto y así se desplazaron hacía las afueras de la ciudad. Nosotros nos encontrábamos en el lugar del evento, con sorpresa vimos que del grupo de profesores y padres que asistirían, sólo había uno, éramos cuatro para responder ante cualquier eventualidad. Llegaron los buses con 200 personas aproximadamente, los demás fueron llegando con sus padres que los dejaban a la entrada, que es la orilla de una carretera. A continuación narraremos cómo cuatro adultos asumimos la responsabilidad de un evento con 700 niños y niñas entre 12 y 18 años. El parqueadero del establecimiento comenzó a llenarse de asistentes, muchos, con una botella de aguardiente en su mano, sabían que debían consumirla antes de entrar al salón, los guardias de seguridad controlan a la entrada que no ingresen con armas o con bebidas alcohólicas. Nos empezamos a preocupar al ver el gran número de menores tomados, con la mirada perdida, caminando sin equilibrio y peleando a la orilla de la carretera por donde pasaban vehículos y camiones a gran velocidad, decidimos llamar al número 123 para solicitar apoyo de la policía en el control de los menores de 18 años y para que les quitaran el licor. Inmediatamente llegaron tres agentes, muy amables, se pusieron a nuestra disposición, comenzaron a pedir identificaciones para sorpresa nuestra muchos de ellos tenían cédula o contraseña falsa, por la edad que reflejaban sus rostros y su actitud, esto inhabilitó la acción de los policías, nos lo podían proteger y nosotros tampoco. Sin embargo su presencia ayudó a poner orden en el parqueadero. Al interior del establecimiento, en la zona contratada donde estaban bailando no se les vendía licor a los menores de edad, pero existía un área VIP para los mayores, que es de fácil acceso para todos en donde se vende licor, presentando cédulas y contraseñas falsas. Pedimos a los encargados de seguridad del establecimiento y a los dueños, quienes empezaron a contagiarse con nuestro actuar, ellos cerraron todas las entradas e impidieron el acceso de los menores a la zona VIP. La persona dueña de la miniteca, un muchacho joven, se nos acercó y nos comentó que al principio cuando nos vio en el parqueadero se sorprendió, pues el maneja varios eventos de jóvenes y menores durante los fines de semana y nos comentó que nunca ve padres de familia acompañando estas fiestas. También nos dio un apoyo
  • 2. decidido, por iniciativa propia fue con uno de los policías a buscar el lugar en donde los jóvenes estaban comprando el licor, encontró una tienda cercana al establecimiento en donde el dueño irresponsablemente les proporcionaba el trago con facilidad, el lugar fue sellado. Durante las rondas que hicimos dentro del establecimiento, vimos también MUCHOS niños, niñas y adolescentes que se divirtieron sin consumir alcohol ni drogas. En un momento nos buscaron los jóvenes organizadores pidiéndonos ayuda porque se estaban robando celulares y carteras y había peleas entre los muchachos. La policía, nuevamente, acudió a nuestro llamado, les dimos autorización para requisar a los jóvenes. Encontraron papeletas con cocaína y algunos menores drogándose en los baños, droga que fue incautada por los agentes. A los que se encontraban en grave estado de alicoramiento o drogados fueran retirados de la fiesta por la policía, a los menores enfermos les pedíamos el teléfono de sus padres y nos comunicábamos para informarles el estado de sus hijo/a. Una de nosotros se ganó varios insultos por esto, pero no se dejó amedrentar, sabía que estaba haciendo lo correcto. Siempre hubo buena educación y el buen trato de la policía hacía los menores. Finalmente a la 1:00 AM, hora en que se había establecido la salida de los primeros buses hacia Bogotá, comenzó el nuevo reto brindar transporte a 700 asistentes, solo había cinco buses, se mandaron primero a los más pequeños y a las niñas. Se lograron contratar otros buses adicionales a los previstos y a las 3:00 AM pudimos retornar a casa. Para alegría nuestra no sucedió ninguna tragedia y la mayoría de los menores no se dieron cuenta de los impases. Los niñas organizadores, que al principio no querían que asistiéramos, llamaron a esa hora a nuestros celulares agradeciendo nuestra presencia y colaboración en la fiesta, nos decían: “gracias, sin ustedes las cosas no habrían salido igual”. Sentimos que aunque sean alumnos de once grado, e hicieron lo mejor que estaba a su alcance, no se puede dejar en ellos una responsabilidad de tal magnitud. Hay cosas que para futuros eventos pensamos que como padres y madres vamos a seguir acompañando, desde la organización, para velar por temas como la seguridad del lugar, las salidas de emergencia, la capacidad del lugar, la ventilación, la asistencia médica y, finalmente, permitir que pueda divertirse sanamente y no correr peligros. Crónica escrita para M@il PaPaz 58 en septiembre de 2008, por padres de familia que quisieron compartir su experiencia con otros, no se publican nombres, ya que sólo se pretende ilustrar.