1. Ha pasado un mes tres días desde que mi mamita está en presencia de Dios, es duro aceptar su voluntad y me duele en el alma el ya no tenerla físicamente, pero le agradezco a Dios el habernos permitido, sobre todo a Dome y a mí, compartir con ella tantos momentos inolvidables. El amor que sentimos por usted no terminará jamás, al igual que la gratitud que le tengo MAMITA, por haber sido mi compañera en ese caminar día tras día y por haber sido abuelita, madre, compañera de deberes, amiga, hermana y cómplice de mi Dome, sólo puedo decir gracias MAMITA por todo el amor que nos brindó y por su entrega total, y que Dios le tenga gozando de su presencia junto con papi y las ñañitas. VIVIRÁ POR SIEMPRE EN NUESTROS CORAZONES GRACIAS MAMITA