2. Huatulco
Escoltado por la poco explorada Sierra Madre del Sur, Huatulco es
un conjunto de nueve bahías y más de 30 playas donde además es
posible disfrutar de cascadas prístinas, ríos impetuosos, fincas
cafetaleras y biodiversidad insospechada. Cerros cubiertos de selva
baja enmarcan este escenario, que de junio a noviembre son de
un verde intenso, y de diciembre a mayo tienen el color café de la
estación seca. Se dice que por aquí llegaron los toltecas y
Quetzalcóatl, quien plantó una enorme e indestructible cruz.
3. UBICACIÓN
Las Bahías de Huatulco se localizan en la costa del Estado de
Oaxaca, en la parte final de la Sierra Madre del Sur. Abarcan 35
kilometros del Litoral Pacífico Mexicano, entre los rios de Coyula y
Copalita. Situado a 277 km de la capital de Oaxaca y a 50 minutos
de la ciudad de México vía aérea. Cuenta también con vías de
acceso terrestre y marítimo donde el clima cálido permite disfrutar
de 365 días soleados al año y solamente 40 días lluviosos.
4. Reconciliación con la tortuga
marina
Durante varias décadas, Mazunte fue parte del
rastro de tortugas más grande de México. Hoy es
el sitio donde se promueve la conservación de
este maravilloso animal. Una reconciliación con
la tortuga marina es la historia de Mazunte,
paradisíaco destino de la costa oaxaqueña. Y es
que a mediados del siglo XX, fue parte del rastro
de tortugas más grande de México. Aquí llegaba
una gran cantidad de tortugas marinas a
desovar, pero tanto su carne como sus huevos
eran un preciado alimento para las comunidades
cercanas. Tras la declaración de la veda total de
la tortuga marina en 1990, precisamente en
Mazunte comenzó a construirse un museo vivo
donde se promueve el cuidado de los quelonios.
5. Santa Cruz, pintoresco remanso
Las tranquilas aguas de Bahía de Santa Cruz invitan a darse un chapuzón en
familia y descubrir las riquezas submarinas en un tour de esnorquel o buceo. La
famosa bahía de Tangolunda, que alberga a la zona hotelera de Huatulco, se
hermana con la bahía de Santa Cruz por un boulevard costero que desemboca
en el pueblo de La Crucecita, sitio de reunión de los lugareños, donde la calidez
de los oaxaqueños abraza al visitante. Aquí pueden encontrarse restaurantes
con comida típica de Oaxaca, pequeños hoteles y un mercado de ropa,
accesorios de playa y artesanías.
6. Nueve maneras de disfrutar del
paraíso
Tangolunda, Chahue, Santa Cruz, Conejos,
Maguey, Cacaluta, San Agustin, Chachacual
y Organo: las nueve inolvidables bahías de
Huatulco; ¡pon un pie en todas ellas! Las
tranquilas bahías de Huatulco son ideales
para practicar una amplia gama de
deportes acuáticos, como la natación,
esnórkel, jet esquí, windsurfing y vela. Si lo que
nos gusta es bucear o practicar el esnórkel,
quedaremos sorprendidos por las cristalinas
aguas de Huatulco. La escarpada costa de
la zona y muchos arrecifes de coral crean
conjuntos de variada vida submarina que
únicamente está a la espera de ser
explorada.