La abuela le cuenta a su nieto sobre cómo era la vida cuando ella era joven, antes de la existencia de muchas tecnologías y conceptos modernos. Vivía en un mundo sin televisión, vacunas contra la polio, comidas congeladas, fotocopiadoras, faxes, lentes de contacto o la píldora anticonceptiva. Las relaciones, géneros y sexualidades eran vistas de manera más tradicional. La sociedad estaba más definida por valores religiosos y morales que por estrés, terapias o psicólogos. A pesar de

9. Fuimos la última generación que creyó que una señora necesitaba un marido para tener un hijo. Ahora dime, ¿cuántos años crees que tengo? El chico respondió: “ ¿Más de cien?”