Un cangrejo astuto coloca una piedra dentro de una ostra para impedir que se cierre, y así poder comérsela. La lección es que siempre hay alguien escuchando los secretos de los demás y aprovechándose de la vulnerabilidad que esto causa. Un cangrejo nota que una ostra deja sus valvas abiertas para admirar la luna y planea cómo comérsela cuando esté más expuesta.