1. Las Mujeres<br />Día Internacional de la Mujer: ¡Queremos todos nuestros derechos!Por Zula LuceroEl 8 de Marzo es el día internacional de la Mujer Trabajadora. Esta jornada de lucha por los derechos de las mujeres fue establecida por el Congreso Mundial de Mujeres Socialistas en el año 1910, a pedido de la dirigente socialista ClaraZetkin. Existen diferentes versiones con respecto a la elección de esta fecha. La historiamás conocida hace referencia a los hechos sucedidos en el año 1908, donde 146 trabajadoras de la fábrica textil Cotton de Nueva York, morían en un incendioprovocado por la patronal. Aquellas mujeres luchaban por mejoras salariales, por el descanso dominical y contra el trabajo infantil. Sin embargo existen otras versiones con respecto a la designación de esta fecha. El estudio realizado por Isabel Álvarez González publicado bajo el título “Los orígenes y la celebración del Día Internacional de la Mujer” manifiesta queelincendio que se vincula con la celebración de esta fecha no fue el 8 de marzo, sino el 25 de marzo de 1911. También se relaciona esta fecha con una manifestación de trabajadoras textiles, en Nueva York que habría ocurrido el 8 de marzo de 1908 o 1857. Las historiadoras Liliane Kandel y François Picq consideran que la manifestación del año 1857 es un mito creado para eliminar el carácter socialista de la conmemoración de este día. Pero más allá de las diferentes versiones sobre el día internacional de la Mujer, la realidad muestra que muy pocas cosas cambiaron desde aquellas jornadas. Elcapitalismo, fundado en una sociedad patriarcal, somete a millones de mujeres de diversas formas: la trata de personas, el trabajo precario y esclavo de las maquilas, la pobreza, el hambre, la violencia. El cuerpo de las mujeres continúa siendo el campo donde se libra la batalla de la opresión. A pesar de esto, la resistencia es más fuerte.<br />Feminismo<br />El movimiento feminista ha sido una lucha por el reconocimiento de la igualdad de oportunidades y la igualdad de derechos para las mujeres. Las dificultades para obtener este reconocimiento se han debido a factores históricos, en combinación con las costumbres y las tradiciones sociales. Actualmente, gracias a los cambios económicos, el apoyo del poder económico y los esfuerzos del movimiento feminista de hace décadas y otros movimientos de derechos humanos, en la mayor parte de las sociedades las mujeres tienen acceso a carreras y trabajos, más allá de la atención de los quehaceres domésticos o de ama de casa. Tras haber luchado por sus derechos las mujeres en la mayoría de los países occidentales y orientales no musulmanes la mujer llegó a tener una igualdad muy fuerte tanto en el ámbito laboral como familiar logrando ser jefas de familia, tener cargos altos tanto en política como en grandes empresas y en muchas carreras. Así que se podría decir que las condiciones de las mujeres han mejorado.<br />Algunas corrientes feministas resignifican la palabra mujer, entendiéndose que la categoría mujer esta estrechamente vinculada a la expresión de genitalidad, por lo que frecuentemente se presupone que mujer es aquella cuya expresión gonádica es igual a XX. Esta articulación discursiva se soporta sobre fundamentos biológicos y esencialistas. La naturalización del concepto impide su cuestionamiento, dogmatizandolo. Sin embargo, desde diferentes corrientes feministas, esto ha sido abordado y revisado. El sistema sexo, genero y sexualidad es en sí mismo, producto de una construcción sociocultural que responde a las necesidades y a los intereses de un mecanismo de control de los individuos, y de una reproducción de las estructuras de poder. Ademas, la categoría mujer se conceptualiza en tanto que opuesta a la categoría hombre, formando así un binomio, mutuamente excluyente, a partir del cual se articula el dispositivo del genero (femenino - masculino, respectivamente). Bajo este paradigma se invisibilizan las opresiones que se dan cuando las personas no reproducen exactamente los esquemas preestablecidos, limitando la diversidad de las expresiones sexuales y de genero, omitiendo y dejando al margen fenómenos como la transexualidad y la intersensualidad.<br />