Este documento ofrece ánimo y consejos a las madres sobre la importante responsabilidad de entrenar a los hijos. Cita varios versículos bíblicos que enfatizan la importancia de corregir y disciplinar a los hijos desde temprana edad para guiarlos por el buen camino. Alienta a las madres a no descuidar esta tarea y a mantener la Palabra de Dios como su guía, a pesar de las ideas opuestas del mundo.
1. Ánimo para madres
“No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a si tiempo
segaremos, si no desmayamos.” (Gál. 6:9)
El Señor me ha estado recordando últimamente, a través de mi
esposo y de otros, que continuamente debo estar a las vivas,
vigilando y entrenando a los niños. Como madre, no tengo descanso
de mi responsabilidad– Tengo que estar disponible y lista 24 horas
al día, 7 días a la semana. Gracias a Dios, tengo un esposo que está
sirviendo al Señor, y lleva más de la mitad de la carga. (Mi esposo
incluso trabaja en casa la mayor parte del tiempo, ¡lo que es una
bendición!) Pero también sé que mucho depende de mí. “La mujer
sabia edifica su casa; Mas la necia con sus manos la derriba.” (Prov.
14:1).
Pensé en compartir con ustedes, otras madres, estos versículos de la
Palabra, que han sido un ánimo para mí en mis responsabilidades de
entrenamiento de los niños. Los tengo en mi refrigerador, donde
puedo verlos todos los días.
“El que detiene el castigo, a su hijo aborrece; mas el que lo ama,
desde temprano lo corrige.” (Prov. 13:24)
“Castiga a tu hijo en tanto que hay esperanza; mas no se apresure tu
alma para destruirlo.” (Prov. 19:18)
“La necedad está ligada en el corazón del muchacho; mas la vara de
la corrección la alejará de él.” (Prov. 22:15)
“No rehúses corregir al muchacho; Porque si lo castigas con vara, no
morirá. Lo castigarás con vara, y librarás su alma del Seol.” (Prov.
23:13, 14)
“La vara y la corrección dan sabiduría; mas el muchacho consentido
avergonzará a su madre.” (Prov. 29:15)
“Corrige a tu hijo, y te dará descanso, y dará alegría a tu alma.”
(Prov. 29:17)
2. “Es verdad que ninguna disciplina al presente parece ser causa de
gozo, sino de tristeza; pero después da fruto apacible de justicia a los
que en ella han sido ejercitados.” (Heb. 12:11)
Las bendiciones de Dios reposan sobre aquellos que siguen Su
camino. El mundo tiene ideas completamente opuestas al camino
del Señor. Pero “La Palabra de Dios… permanece para siempre.” (1
Pedro 1:23)
Por Mónica Rohrer