Un cliente en un restaurante se queja del sabor de un postre y hace preguntas sobre su agua y la cuenta, a lo que el mesero responde solo con refranes y proverbios en lugar de respuestas directas. Esto frustra al cliente, quien finalmente amenaza con irse sin pagar a menos que el mesero explique los cargos en la cuenta de manera clara en lugar de con más refranes.