Los drones se han convertido en herramientas esenciales para la industria audiovisual en Bolivia al permitir obtener imágenes aéreas de alta calidad a un costo menor que opciones tradicionales como grúas o helicópteros. Su uso ha crecido notablemente desde 2013 y ha revolucionado la producción audiovisual local, ampliando la creatividad de las empresas. Aunque su alquiler tiene un costo, es menor que comprarlos y requieren tiempo de aprendizaje para su operación, especialmente para filmaciones. Los jóvenes están liderando el
1. Drones elevan la producción audiovisual local
El uso de la tecnología crece de la mano de las nuevas generaciones
Uyuni. Un dron empleado en la producción de un documental. Foto: América economía
La Razón (Edición Impresa) / Wálter Vásquez / La Paz
00:00 / 30 de marzo de 2014
Los drones han revolucionado en el último año la industria publicitaria audiovisual del
país, convirtiéndose en herramientas esenciales para realizar productos de gran calidad y
ampliando el horizonte de creatividad de las empresas.
Hasta hace muy poco, el poder contar con imágenes aéreas estaba reservado a aquellos
que disponían del presupuesto suficiente para alquilar una grúa, un helicóptero o una
avioneta. Pero desde 2013, los drones (vehículos aéreos no tripulados y dirigidos a control
remoto) han comenzado a ser utilizados en las filmaciones con notables resultados, según
el Artículo “Videos desde el cielo” de la revista AméricaEconomía Bolivia.
Por ejemplo, las productoras que trabajan con el Ministerio de Obras Públicas han
empleado con éxito este tipo de recursos en las campañas publicitarias sobre la
construcción de caminos y el teleférico, logrando productos con calidad internacional.
2. “Los drones son una verdadera revolución para la producción audiovisual. Nos permiten
tener un punto de vista diferente e imágenes espectaculares sin tener que invertir mucho
dinero”, explica Carmen Navarro de la productora Ego Audiovisual.
Hasta antes de la llegada de esta tecnología, el obtener imágenes aéreas era muy costoso,
además de que existían limitaciones técnicas que condicionaban el uso de ese tipo de
tomas.
“Los drones se alquilan debido al costo que representa comprarlos y el tiempo de
aprendizaje que se requiere para operarlos de manera adecuada sobre todo para las
filmaciones”, dice Santiago Loayza, de Alma Films.
Según Navarro, los costos de alquiler fluctúan entre los $us 700 y 1.700, dependiendo de
la complejidad del equipo; mientras que si se decide comprar uno, la inversión puede
ascender hasta los $us 15.000.
Interés “Esta tecnología es nueva en Bolivia. Estos bichos pueden incursionar en áreas de
desastres naturales o que signifiquen algún peligro para los seres humanos”, afirma Álex
Chipana, aficionado a la tecnología y uno de los primeros constructores de un dron en el
país, prototipo que ya ha participado en varias filmaciones publicitarias.
Chipana está convencido de que este artefacto tiene también muchas otras aplicaciones,
prueba de ello es el desarrollo de un prototipo con inteligencia artificial en la Escuela
Militar de Ingeniería y la oferta de drones para monitorear el ganado en los llanos de Beni
y Santa Cruz.
En criterio del ciberactivista Mario Durán, la apuesta por el uso cada vez mayor de
recursos tecnológicos como los drones es un desafío que ha sido asumido plenamente por
los jóvenes, quienes tienen la posibilidad de adecuar los avances tecnológicos a las
demandas del país.