El poema describe al autor encontrando una pequeña planta renaciendo entre las tumbas de un cementerio, donde nadie más mira. Aunque la planta crece entre las cenizas y huesos de los muertos, ha encontrado sustento y representa una nueva vida germinando. El autor aprende de la planta que incluso desde las sombras de la muerte, puede hacer algo hermoso como un sol dorado para iluminar su vida.