2. "Quien come mi Carne y bebe mi Sangre
habita en mí y yo en él" . Jn. 6,56.
3. “No temas, porque yo estoy contigo; no te desalientes,
porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré, ciertamente te
ayudaré, sí, te sostendré con la diestra de mi justicia”. Is. 41, 10.
4. “Entonces María dijo: He aquí la
sierva del Señor; hágase en mí
conforme a tu Palabra”. Lc. 1, 38.
5. “En verdad les digo que ninguno que haya
dejado casa, mujer, hermanos, padres e
hijos por amor al reino de Dios dejará de
recibir mucho más en este siglo, y la vida
eterna en el venidero” . Lc. 8, 29 - 30.
6. “Guárdame, oh Dios, que en tí me refugio. Digo
a Yahve: Tú eres mi Señor, mi bien, nada hay
fuera de ti”. Salmo 16, 1 - 2.
7. “Mas para mí, mi bien es estar junto a
Dios; he puesto mi cobijo en el Señor, a fin
de publicar todas tus obras. Salmo 73, 28
8. “Amarás al Señor tu Dios con todo tu
corazón, con toda tu alma y con todas tus
fuerzas. Queden en tu corazón estas
palabras que yo te he dicho hoy”. Dt. 6, 5
9. “Acudían asiduamente a la enseñanza de los apóstoles,
fieles a la comunión fraterna, a la fracción del pan y a las
oraciones...Acudían al Templo todos los días con
perseverancia y con un mismo espíritu, partían el pan por
las casas y tomaban el alimento con alegría y con sencillez
de corazón”. Hch. 2, 42 .46.
10. “Les exhorto hermanos, por la misericordia de
Dios, a que se ofrezcan a ustedes mismos como
un sacrificio vivo, santo, agradable a Dios. Y no
se acomoden a este mundo, antes bien
transfórmense mediante la renovación de su
mente”. Rom. 12, 1 – 2.
11. “Dios te cuida y nunca duerme. ¡Dios cuida de Israel, y nunca duerme!
Dios te cuida y te protege; Dios está siempre a tu lado. Durante el día,
el sol no te quemará; durante la noche, no te dañará la luna. Dios te
protegerá y te pondrá a salvo de todos los peligros. Dios te cuidará
ahora y siempre por dondequiera que vayas”. Salmo 121, 3 - 8.
12. “Mi gracia te basta, que mi fuerza se muestra
perfecta en la flaqueza. Cuando soy débil, entonces
es cuando soy fuerte»”. 2 Corintios 12, 7-10.
13. ¡Ten confianza en el Señor!
¡Ten valor, no te desanimes!
¡Sí, ten confianza en el Señor! Salmo 27, 14
“Hacia ti, Dios mío, tiendo los brazos,
y te llamo a todas horas”. Salmo 88, 9 b
14. “El que me ama, mi Palabra
guardará; y mi Padre le amará,
y vendremos a él, y haremos
morada con él”. Jn. 14, 23.
15. “Dame la sabiduría asistente de tu trono, porque
ella conoce y entiende todas las cosas, y me guiará
prudentemente en mis obras, y me guardará en su
esplendor”. Sb. 9a,4.11
16. "El Cordero que está en medio del trono los apacentará y los
guiará a los manantiales de las aguas de la vida. Y dios
enjugará toda lágrima de sus ojos“. Ap. 7, 17.
17. Inspectoría “Sagrado Corazón”
Texto: “Selva patria del corazón”
María Dominga Grassiano FMA, María Troncatti
Diseño: Equipo de Espiritualidad Salesiana - FMA – ECU