Durante la Segunda Guerra Mundial, un consejero de Winston Churchill organizó oraciones nocturnas colectivas en Inglaterra por la paz y seguridad, lo que tuvo un efecto asombroso al terminar los bombardeos. Ahora, grupos en América del Norte están invitando a la gente a orar a las 8 pm diariamente por la paz mundial, para terminar los conflictos. El documento pide difundir este mensaje sobre el poder de la oración.