El documento describe el plan de estudios típico para un samurai según la pedagogía Bushido. El plan de estudios se centraba principalmente en artes marciales como esgrima, tiro con arco y jiujutsu, así como equitación y uso de la lanza. También incluía caligrafía, ética, literatura e historia. Gran énfasis se ponía en la caligrafía debido al valor artístico de los logogramas japoneses y porque se consideraba un reflejo del carácter personal.