1. NUEVA LEY QUE FAVORECERÁ EL CINE
EN COLOMBIA
En la Casa de Nariño se sancionó la nueva ley de cine, que incentivará
la grabación de películas en el territorio nacional, podría comenzar una
nueva etapa para el cine colombiano. Una etapa que permitirá la inversión de
capital extranjero para la filmación Colombiana.
El Gobierno devolverá a las productoras (nacionales y extranjeras) hasta el 40
por ciento de los costos de servicios de producción contratados en el
país (rodaje, fotografía, revelado, preproducción y posproducción) y hasta el
20 por ciento de lo que inviertan en alojamiento, transporte y alimentación.
Con tal fin, se crearon un fondo fílmico de 25.000 millones de pesos al año,
alimentado con recursos del presupuesto nacional, y un comité de promoción
fílmica, que aprobará los proyectos que se rodarán en el país. El fondo fue
aprobado por un periodo inicial de 10 años.
“No podemos calcular cuántas películas extranjeras vamos a tener con la
nueva ley porque eso depende de lo que cuesten, pero sí podemos decir
que ingresarán 42 millones dólares y el Gobierno devolverá unos 12,5“, dijo
Adelfa Martínez, directora de cinematografía del Ministerio de Cultura.
La jefe de esa cartera, Mariana Garcés, agregó que actualmente “se ruedan
películas de 3.000 millones de pesos para abajo; quisiéramos pellizcar el
mercado internacional, con proyectos de 30 millones de dólares”.
Para Claudia Triana, directora de Pro imágenes (fondo mixto de promoción
cinematográfica), esta ley pone al país a la altura de las legislaciones más
atractivas para la inversión en cine, que solo tienen 17 países. Además, los
honorarios para grandes estrellas extranjeras que puedan filmar en Colombia
no tributarán en el país y se crearán visas especiales para el ingreso de
personal artístico y técnico foráneo.
Los beneficios que entregará Colombia son similares a los que otorga Puerto
Rico, donde, tras una norma similar, ya se están construyendo grandes
estudios de cine. Otro ejemplo es el de Hungría, país en el que se pasó de
producir 60 películas al año a hacer 600.
2. “Lo importante es que esta ley no es solo para extranjeros, sino para
productores nacionales”, dijo la ministra de Cultura, Mariana Garcés, quien
precisó que los realizadores colombianos tendrán que elegir entre este fondo
y el que fue creado por la Ley 814 del 2003.
Un paso, pero con reservas
Aunque hubo un consenso de los artistas frente a la norma, también hay
reservas. Por ejemplo, el riesgo de que solo se elijan proyectos que
promuevan una buena imagen del país.
“Me parece bien restringir para que no se hablen horrores o se digan
mentiras; pero no para que hablen bien del país porque eso podría restringir
las miradas diferentes de la convencional”, advirtió el director Sergio
Cabrera.
Para él, “la ley es un paso más en el largo sendero que tiene la industria para
consolidar más la infraestructura, y ayuda a que se produzca toda clase de
cine en el país”, pero no debería “encerrarse y apoyar solo las películas que a
cierto grupo le parezcan. Ese no sería el camino correcto”. Sobre este punto,
Adelfa Martínez dijo que no habrá restricciones ni en temas ni en formatos.
Rodrigo Guerrero, de la firma colombiana Dynamo, que ha producido
películas como La cara oculta y Contracorriente, aseguró que “esta es una
prueba de fuego para los productores” y que la nueva ley generará empleos.
Según una investigación hecha por su equipo, por cada millón de dólares que
se invierten en una producción se generan 400 empleos.
Y, de acuerdo con los cálculos del Gobierno, en los primeros 5 años de la ley
se generarán 4.000 empleos temporales.
Guerrero afirmó que, a la fecha, hay unas diez productoras nacionales en
capacidad de prestar los servicios cinematográficos que requieren las
extranjeras, pero la ley generará la necesidad de que se formen más.
Tanto él como Manolo Cardona, director de 11:11 Films, anunciaron varios
proyectos con productoras extranjeras a punto de concretarse. La nueva
norma no incluye producciones de televisión, pero sí incentivos para
telefilmes.