El trabajo social se remonta a la colonización española en Colombia cuando los aborígenes sufrieron trabajos forzados y abusos, llevando a un comienzo difícil para la profesión. Mary Ellen Richmond fue una pionera estadounidense del trabajo social en el siglo XIX, sirviendo como tesorera y secretaria general de la COS y formulando las primeras declaraciones de principios para la práctica del trabajo social directo.