Este documento habla sobre varios lugares y aspectos nostálgicos de Córdoba como El parador de la Arruzafa, Las Ermitas de Córdoba, el camping Municipal, el tablero, los trenes de Córdoba y los jardines del Duque de Rivas. También expresa el autor su deseo de pasear solo por las calles de Córdoba y quedarse allí para siempre disfrutando del olor a azahar y las noches de jazmín.