1. Actualidad sobre los emprendedores y las industrias del derecho de autor en Colombia
Boletín informativo de la Dirección Nacional de Derecho de Autor
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El Proyecto de Ley que busca regular las infracciones al los derechos de autor en
Internet, ha generado gran polémica entre los usuarios de la red, en gran parte por
la desinformación que existe al respecto. Pero los grandes temores de la mayoría de
los internautas radican en que sienten amenazados sus derechos a la información, a
ARTÍCULOS
la libertad de expresión y a la intimidad, pero nada de esto es cierto, el proyecto no
pretende en ninguno de sus artículos censurar, no crea una Policía de la internet, “SI HAY ALGO QUE TIENE QUE
no obliga a ningún prestador de servicio (ISP) a revisar la información que los COMPRENDER EL USUARIO DE
usuarios compartan ni mucho menos mete presos a aquellos que descarguen INTERNET, ES QUE TODA OBRA
contenidos ilegales, pero si a quienes publican y comercializan contenidos en CREATIVA TIENE UN DUEÑO
internet de los cuales derivan un lucro, enriqueciéndose con un trabajo que no es el LEGÍTIMO QUE LA CONSTRUIDO
suyo. CON SUDOR, DOLOR Y PASIÓN!”.
Palabras de Jorge Franco, Escritor
Este proyecto de Ley busca crear unas reglas en Internet para que no se vulneren los Colombiano.
derechos de nuestros autores y artistas, busca fortalecer una cultura de respeto al
trabajo de quienes decidieron apostarle a la cultura en nuestro país. Por eso en esta
“NO PODEMOS NI DEBEMOS
DISPONER DE ALGO QUE NO ES
edición daremos un espacio para saber qué opinión le merece este proyecto de ley a
NUESTRO”
dos grandes creadores colombianos: El primero de ellos, Jorge Franco, escritor de
Palabras de Jose Gaviria, músico,
las novelas Paraíso Travel, Rosario Tijeras, Melodrama, Maldito amor y Mala Noche. compositor y productor.
El segundo, José Gaviria, músico, productor, arreglista, cantante y compositor
colombiano.
eL deRecho de auTor es liteRatura
SI HAY ALGO QUE TIENE QUE COMPRENDER EL USUARIO DE
INTERNET, ES QUE TODA OBRA CREATIVA TIENE UN DUEÑO
LEGÍTIMO QUE LA CONSTRUIDO CON
SUDOR, DOLOR Y PASIÓN!
“Desde hace pocos años el libro ha venido sufriendo una metamorfosis de
dimensiones insospechadas. Lo que en un principio fue escritura sobre piedra,
luego sobre papiros, más adelante, tal y como la conocemos ahora, sobre papel,
ha dado un giro radical y rápido para ponerse a la par de los avances
tecnológicos. El libro, como lo leemos hoy, desaparecerá en los próximos años,
y las editoriales, conscientes de este fenómeno, han comenzado a ejecutar
acciones para que la literatura no quede rezagada en la era digital. Vamos un
poco más atrás que la música y el cine, pero también hemos aprendido de la
JORGE FRANCO, ESCRITOR
difícil experiencia que ellos han padecido en este proceso y por esa razón
quisiéramos tomar las medidas preventivas para evitar sufrir los abusos por los que ellos han pasado en esta evolución a los medios
digitales. Abusos que tiene que ver con el uso ilegal de su trabajo a través de la piratería física y digital.
El libro, y la literatura como patrimonio, también han padecido en lo físico los rigores de las
mafias de la piratería con todos los efectos negativos que esto implica para la economía, para
la industria, para el empleo, y por supuesto, para los mismos autores. Hoy en día los
contratos con los autores no se firman, lamentablemente, basados en la calidad literaria del
autor sino en sus ventas. Y claro, la piratería del libro afecta más a quienes venden más, pero
en el paso que se está dando actualmente hacia el libro electrónico, la posibilidad que
cualquier autor, así venda mucho o venda poco, pueda ofrecer su obra en el mercado digital,
es muy alta, tan alta como es la posibilidad de que su obra se lea, de una manera ilegal, tal y
como les sucede a los que más venden. Y, pongo este ejemplo porque así sucede
actualmente con el libro físico, al momento de firmar los contratos para las ediciones
digitales, los editores o quienes vayan a comandar esas nuevas plataformas, tendrán solo en
cuenta las descargas legales, las ventas que ellos puedan asentar en sus libros, lo cual
afectará negativamente al creador, al autor de la obra literaria, poniendo en riesgo la
publicación y la difusión de sus futuras obras.
Las posibilidades para el libro en Internet son muchísimas y muy positivas. Se superarán las fronteras que el medio editorial hoy no
alcanza a cubrir. La lectura aumentará y los precios bajarán. Hace muy poco, el diseñador de una de las tabletas electrónicas más
novedosas, informó que en el 2010, sólo a través de su tableta, hubo más de cien millones de descargas de libros legales, a p recios muy
por debajo de los libros físicos.
Hoy en día, cualquier persona puede llevar en un mismo aparato, su agenda, su música, sus
juegos favoritos, su álbum de fotos, y también puede llevar sus libros. Pero debemos cortar de
una vez por todas con la idea cómoda y demagógica que todo los que cargamos en esos
aparatos electrónicos tiene que ser gratis. Gratis, ¿por qué? ¿Por qué tengo que ofrecer
gratuitamente mis libros si cada uno me ha tomado años de trabajo, de investigación, de
esfuerzo, de alegrías y de tristezas? ¿Por qué gratis si lo que siempre he soñado es poder
dedicar todo mi tiempo a la escritura y si mis libros no me dieran para hacerlo, entonces tendría
que buscar otra ocupación que no me permitiría tener el tiempo libre para escribirlos?,
¿Por qué quien vende seguros, carros, alimentos, servicios públicos no los da gratis? ¿Por qué
no es gratis el agua a la que tenemos derecho y necesitamos todos los seres humanos? Porque
sabemos que detrás todo producto y de todo servicio hay un esfuerzo que se valora a través de
un pago. Sigo sin entender, entonces, por qué la cultura tiene que ser la excepción.
Si hay algo que tiene que comprender el usuario de internet que ama la música, que ama el cine o la literatura es que toda obra
creativa o artística tiene un dueño legítimo que la ha construido con sudor, dolor y pasión, y no puede obligarse a ese creador a
regalar su obra, simplemente porque lo han vencido las mañas y la astucia de quienes ejercen el manejo del espacio digital. Es una
obligación moral de los proveedores de los servicios de Internet y de los usuarios, respetar esa propiedad intelectual y legí tima del
artista.
No se debe desaprovechar la oportunidad que ofrece Internet para que nuestro arte, el arte y la
creación colombiana, lleguen con mayor rapidez y eficacia a todos los rincones del mundo; no
existe hoy en día una mejor manera de divulgación, pero hay que crear un orden, unas reglas de
juego para que el arte y la cultura sigan teniendo un valor, y ese valor es el tiempo, la dedicación,
el esfuerzo, la creatividad y la vida que cada artista le dedica a su obra, y, dentro de un mundo
legal, ese valor tiene que convertirse en un estímulo para que siga habiendo más arte, más cultura y
creación, para que nuestro país, más allá de los avances económicos, más allá de superar los
problemas que nos han agobiado por décadas, preserve su alma, que no es otra cosa que su arte
y su cultura”.
Si desea leer más sobre la obra de Jorge Franco, puede visitar su sitio web: www.jorge-franco.com
eL deRecho de auTor es múSica
“NO PODEMOS NI DEBEMOS DISPONER DE LOS QUE
NO ES NUESTRO”
Llevo 20 años dedicado a la música, hace unos 14 vivo de ella. Ha
sido un carrera fascinante, muy complicada y difícil también, por
presupuestos cada vez más limitados.
Vender discos siempre fue difícil, para la música nacional
especialmente y pues hoy en día ni se diga.
Para quienes hacemos música, esta expresión es pasional, es la
forma en que vemos el mundo. Tal vez en ese sentido nos
permitimos ser Románticos, pero eso no hay que confundirlo con
las constantes e innumerables horas de trabajo que hay detrás de
cada proyecto.
Es claro que estamos ante una crisis de una industria donde no hay ventas sustanciales, algunos argumentan que los precios de la
música en nuestra país son altos y eso ha permitido una piratería masiva. Por mi parte, en algunos aspectos estoy de acuerdo... los Cd's,
soporte que me compete, podrían llevar precios diferentes, siempre abogo por ello cuando de mi depende algún proyecto en
producción.
Sin embargo también siempre me ha parecido curioso que a los que me más oigo quejarse de estos precios, son los de poder adquisitivo
alto, los que pueden entrar a una tienda a comprar y no a los estratos más bajos.
No obstante, que la piratería es una realidad a todo nivel y en todos los estamentos de nuestra sociedad, eso no nos da derecho a
decidir que debe ser gratis o como disponer de algo que no es nuestro.
Como compositor, quienes componemos vivimos de la inclusión de temas en proyectos, de su difusión en todo tipo de medios y
cualquier tipo de venta. Al artista o el autor, muchas veces se le ha visto como un ser inspirado que compone, lo cierto es que es una
persona tal vez con sensibilidad más marcada, pero que merece tener reconocimiento económico por su labor, igual que cualquier otro.
Por tanto no podemos pretender convivir dentro de un esquema donde la música en este
caso, sea considerada un tipo de contenido que no esté protegido por los mismos derechos
que amparan las obras en medios convencionales, todos los involucrados debemos
defender el derecho fundamental de que la expresión creativa sea protegida.
Ahora refirámonos al internet como medio de transporte por así decirlo, del contenido
musical. Entiendo la sensación de que el internet ha sido sinónimo de contenido gratis,
sentimos que ya le estamos pagando a un proveedor y que lo que encontremos en las
páginas es nuestro y claro, muchas cosas lo son y están puestas ahí para tal efecto. Pero
hay una diferencia, la mayoría de ese contenido gratis al que nos referimos, como
información, artículos etc., están ahí para nuestro acceso, dispuestos así por quienes tienen
la facultad para hacerlo.
En el caso de la música, el contenido puede ser gratis, este proyecto no está diciendo que no lo sea. Nosotros los creadores de las obras
podemos decidir regalar canciones o álbumes enteros, este proyecto de ley en ningún momento lo impide. Pero lo que si debe quedar
claro, es que quien decide regalar, debe ser el gestor de la expresión creativa, el autor de la obra.
Infortunadamente ha habido gran sensacionalismo, confusión y especulación a cerca de este proyecto de ley. Es evidente que no se
trata de ir detrás del internauta, se trata en cierta medida de hacer cultura y concientizar de que por más que queremos compartir, no
todo se puede, que por más que nos parezca caro el precio de un CD, tomar lo que no es nuestro siempre se ha llamado robar.
En las redes sociales por ejemplo, se hablado de términos como opresión, censura,
violación a la privacidad... Para quienes hemos leído el proyecto de ley, para quienes
entendemos esta industria, es claro que no se trata de eso.
Entiendo al usuario que se siente amenazado porque parte de su rutina puede
cambiar, yo también soy usuario de internet, tengo clarísimo que no hay
opciones en este momento para tener acceso a contenido legal como quisiéramos.
Aunque hay varios factores determinantes para esto, podemos señalar entre otros
que la falta de confianza del usuario para usar una tarjeta de crédito por internet, el
alto costo del uso de tarjetas de crédito que pueden no ser atractivas para las
compañías que tengan portales destinados la venta de éste contenido, sumado a la
carencia de un marco legal confiable para esta industria en cuestión, han dado como
resultado la situación actual.
Y entonces nos encontramos en el círculo vicioso dónde nos quejamos justificando acciones de piratería por no encontrar medios
legales para adquirir contenido en internet y, no hay medios legales porque la cultura de la piratería, la falsa creencia de que debe ser
gratis, o de que está muy costoso, o que ya el artista está suficientemente rico, sumado a la falta de una ley que ampare lo que hemos
venido hablando, no nos permite salir de una encrucijada dónde no sólo los compositores y autores somos los afectados, sino también
el usuario, que rebusca un contenido el cual acaba siendo muchas veces de mala calidad o, ni siquiera consigue lo que si tienen al
alcance internautas dónde estas leyes sí aplican.
Este proyecto de ley se debe ver como uno, dónde no se persigue a un internauta inquieto por contenido o información sino uno que
advierte a quienes no tienen derecho de disponer de contenidos que no son suyos para que no lo hagan.
Tampoco el proyecto afecta a los proveedores de servicio de internet, a quienes más bien se busca como aliados en este esfuerzo que
ya es mundial hace mucho y precisamente al exonerar a las ISPS de responsabilidad, se fomenta el desarrollo normal de esta
plataforma, si el internet sigue creciendo nos beneficiamos todos!
Debo recalcar, volviendo a la música:
Como principio, la venta de todo formato musical grabado ha sido en forma de licencia
permitiendo un uso privativo, hay que recordar que al comprar un CD nunca somos dueños de
la obra, somos dueños de un soporte con limitaciones de uso, por eso es que no podemos
hacer grabaciones para vender o radiodifundir etc. La obra digital está amparada bajo el
mismo esquema.
Ahora, esto no pretende afectar lo que la mayoría de nosotros hace todos los días,
como buscar en Google un tema, ver videos en Youtube, o poner links o enlaces en sitios
como Facebook. Lo que el proyecto de Ley pretende, es que un usuario no pueda disponer
sin autorización de un contenido que no es suyo, para distribuirlo o ponerlo a disposición
en la Red.
Debo recalcar, volviendo a la música:
Como principio, la venta de todo formato musical grabado ha sido en forma de licencia
permitiendo un uso privativo, hay que recordar que al comprar un CD nunca somos dueños
de la obra, somos dueños de un soporte con limitaciones de uso, por eso es que no
podemos hacer grabaciones para vender o radiodifundir etc. La obra digital está amparada
bajo el mismo esquema.
Ahora, esto no pretende afectar lo que la mayoría de nosotros hace todos los días,
como buscar en Google un tema, ver videos en Youtube, o poner links o enlaces en sitios
como Facebook. Lo que el proyecto de Ley pretende, es que un usuario no pueda
disponer sin autorización de un contenido que no es suyo, para distribuirlo o ponerlo a
disposición en la Red.
Si desea leer más sobre Jose Gaviria, puede visitar su sitio web: www.josegaviria.com
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