España ha tenido históricamente una de las tasas más altas de incidencia del SIDA en Europa desde el comienzo de la epidemia, debido principalmente a la transmisión por vía parenteral entre usuarios de drogas. Desde 1983 se han registrado más de 73,000 casos de SIDA en España. La tasa de nuevos casos ha disminuido significativamente desde su pico en 1994, gracias a la terapia antirretroviral efectiva, aunque sigue siendo una de las mayores tasas en Europa Occidental. La transmisión entre usuarios de drogas por v