La derecha estadounidense ha traicionado sus principios de libre mercado y no intervención al apoyar el imperialismo y el militarismo excesivo. Apoyan una gran burocracia estatal para la defensa y la seguridad nacional que socava el libre mercado y las libertades individuales. En lugar de defender los principios de libre empresa y no agresión, la derecha se ha convertido en defensora de un estado grande y poderoso.