El documento presenta varias expresiones y palabras típicas de los santandereanos que difieren de las expresiones estándares. Se describen sustitutos santandereanos para palabras como "alcánzame", "cicatrices", "niños", "hola", "no moleste", y formas de referirse a comidas, bebidas, artículos de vestir y más. Se enfatiza el orgullo de ser santandereano a pesar de las diferencias lingüísticas.