Las plantas desarrollan varias adaptaciones de defensa contra depredadores como estructuras protectoras como espinas y aguijones, la producción de sustancias irritantes o venenosas, el mimetismo para engañar a otros seres vivos, y el camuflaje para ocultarse del entorno como las plantas lithops que se asemejan a piedras. El documento describe estas adaptaciones y ofrece ejemplos de cada una.