Las frutas y verduras, especialmente las de hoja verde, son buenas para el cabello debido a sus vitaminas y minerales. La carne roja, las espinacas y otras verduras son importantes por su hierro, que oxigena el cuero cabelludo y pigmenta el cabello. El zinc de las carnes y pescados es esencial para el crecimiento del pelo. Aceites como el de oliva y hierbas como la salvia y la albahaca juegan un papel antioxidante que también previene la caída del cabello