El genetista chino Jin Li afirma que no se han encontrado descendientes del Homo erectus en China, y que todos los humanos descienden de antepasados africanos. El documento luego presenta imágenes de diferentes personas de Asia, el Pacífico y Australia para ilustrar la diversidad de los orígenes humanos en la región. Finalmente, anima a sanar la historia a través del amor y corrigiendo las mentiras del pasado sobre las razas.