La carta del Gran Jefe Seattle expresa el profundo respeto de la tribu Swamish por la naturaleza y su creencia de que los humanos son solo una pequeña parte de la red de la vida. El jefe Seattle le advierte al presidente Franklin Pierce que la tierra no puede ser comprada o vendida y que los humanos dependen de la naturaleza para su supervivencia. Los comentarios de los estudiantes reconocen la honestidad y sabiduría de las palabras del jefe Seattle, y su llamado a que los humanos aprecien y cuiden a la madre tierra.