Este documento describe una tienda de joyería ubicada en el barrio de Bellavista en Santiago de Chile. La propietaria, Matilde, vende principalmente joyas hechas con lapislázuli, malaquita y piedra cruz. Matilde ha observado que los estadounidenses están dispuestos a pagar sin mucho conocimiento sobre los productos, mientras que los mexicanos y argentinos suelen preguntar más y pedir rebajas. Los europeos saben más sobre lo que quieren comprar y están dispuestos a pagar el precio pedido.