La literatura y el cine comparten similitudes en sus técnicas narrativas, pero también tienen diferencias importantes. Ambos utilizan recursos como personajes, trama y diálogo, pero el cine agrega elementos visuales y de sonido que la literatura no puede igualar. Aunque comparten el objetivo de contar historias de manera creativa, cada medio tiene sus propias fortalezas únicas para involucrar e impactar a la audiencia.