El sabio del Tibet le dice al joven que no hay un camino seguro para llegar al corazón de una mujer, sólo senderos llenos de peligros. Luego, el sabio le da 37 consejos absurdos como lavarse los dientes, no rascarse, regalar muchos presentes, no eructar, no hablar de otras mujeres, y decirle que es bella todo el tiempo. Abrumado por los consejos, el discípulo decide irse porque entiende por qué hay tantos "maricones".