Existen tres tipos principales de hackers: los sombrero negro, cuyas actividades buscan vulnerar sistemas con fines monetarios; los sombrero blanco, que buscan estudiar y fortalecer la seguridad de sistemas; y los sombrero gris, que atacan sistemas para luego ofrecer sus servicios de seguridad. El término "hacker" se refiere originalmente a programadores aficionados, pero con el tiempo también se usó para aquellos que violan sistemas de forma ilegal.